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Narra Mangel:

Me desperté con lágrimas en los ojos, soñé con Rubius, veía como me traicionaba otra vez y yo no podía hacer nada. Me sentía frustrado. Todo en casa me recordaba a el, el baño, la cocina, la habitación... Todo. Me pareció buena idea visitar a Lolito para despejarme y poder contarle mis dramas a alguien, además, es el único que sabe del tema y siendo sincero, prefiero que siga asi.

Narra Lolito:

Esa mañana me sentía raro. No se que era. Sentía necesidad de algo. Me estoy volviendo loco. Fui a lavarme la cara y vi las marcas que me izo Mangel. Me molestaba, pero una parte de mi le gustaba que la gente viera que era "suyo".
Me encontré con Rubius de camino al pueblo, quería comprar cosas para mejorar mi casa de abuela. Por algún motivo no pude contenerme y lo enfrente.
— eres una mierda Rubén Doblas
— que te pasa Lolito? De que hablas?
— lo primero estoy encabronao contigo por lo de Mangel, y lo segundo, hablo de lo que le hiciste a mi niña — mierda, Joder, soy un desastre. Es que no puedo contenerme o que?
— «mi niña»? Así que de ahí salieron tus marcas del cuello no?
— Rubius no es lo que piensas
— a si que hace el numerito delante de mi Vege, y se va a follar contigo no?
— COMO QUE MI VEGE, SERAS CACHO CERDO!—  casi instintivamente le pegue una bofetada — Eso, si, me lo hizo Mangel, pero no follamos, no como tu con «tu vege», además, esto fue fuera de la relación, no como otros... — Nada más decirle eso su cara cambio a una de culpabilidad
— y entonces, porque lo llamas mi niña?
— es un mote, no te alarmas igual que tu le dices «mi mahe»
—Lolito, yo, siento haberte hablado así, solo me dio celos que estuviera con otra persona y que me hubiera superado tan facil, me perdonas?
— Si, pero si tan celoso estabas, haberlo pensado antes de hacerle daño— ya me iba cuando me detuvo y me dijo:
— dile que lo siento, a mi no quiere escucharme
— No le culpó
No iba a ser el mensajero de un infiel. Terminé mis compras y fui a casa. Al rato alguien toco a la puerta. Era Mangel. Le invite a pasar y me dijo que tenía que decirme algo muy importante.

Narra Mangel:

Mientras iba a casa de Lolito, pensaba que le pediría, a ver si podríamos ser compañeros de piso. No soportaba estar en casa y ese recuerdo constante de que Rubius ya no estaba conmigo. Cuando llegué me abrió y vi como se le dibujaba una sonrisa en la cara, adoraba verlo feliz, y haría lo que sea por verlo así.
— Lolito
— dime
— había pensado, que como somos tan amigos y eres el único que me puede ayudar ahora, me preguntaba si... emm yo... nosotros... podríamos... ser compañeros de piso— ya está, ya lo dije, ahora solo quedaba su respuesta
— Mangel, porque no quieres vivir en tu casa — me sorprendió su pregunta. El sabía perfectamente la razón, pero quería que se la dijera y así lo confirmar sus sospechas
— ya lo sabes, son demasiados recuerdos y no puedo — dije a punto de llorar
— No hace falta que te contengas conmigo, si quieres llorar, llora, siempre estaré aquí para ti — tras oír esas palabras rompí a llorar, Lolito me abrazaba fuerte, era lo que necesitaba. Tras un rato, no levantamos y no miramos, Lolito me dijo serio
— claro que quiero que seamos compañeros de piso mi niña — al oírle no pude contenerme y reí
— lo siento, no puedo evitarlo, no te lo diré más— dijo nervioso y con la cara hecha un tomate
— no, me gusta que me llames así, me tranquiliza
— pues te llamare así, «mi niña»

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Amores, me encantó el final. Queréis k Rubius sea malo o k le sude la poya la relacion de estos dos?

Ojalá les guste, un abrazo psicológico bbs <3

AMORES QUE MATAN [MANGELITO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora