Historias cortas sobre suicidas

El rayo de luz en la obscuridad

Me encontraba sentado a la orilla de un edificio de 30 pisos mas o menos,

Mientras acariciaba un gato que encontré fuera de mi apartamento pensaba:

¿Por que todo lo que me ocurre es malo? ¿que hice para merecer algo como esto?

QUE MIERDA DE VIDA ME HAS DADO!! Grite en voz alta sin preocupación de que nadie me escuchaba, de la nada aparece una chica con una extraña vestimenta ofreciendo me una vida diferente, sin sufrimiento y desesperación, con todo lo que soñase.

Como cualquier persona pensé en aceptar a pesar que al gato se sostenía no le agradaba esa mujer así que respondí:

Esta bien, pero cual es el truco?

-No amigo, te equivocas; no hay ningún truco, solo te ofrezco la oportunidad de una vida mejor, confía en mí.

-esta bien

-acercarte

Me acerque paso a paso y por alguna razón sentía la sangre fría como si algo fuese a suceder...... Lo que yo esperaba era un maletín con dinero o una oferta para un empleo pero lo que recibí la verdad me sorprendió......

Lo único que recibí fue una sonrisa psicópata y y una sensación nueva, sentí un grande y afilado cuchillo traspasando lentamente mi carne, todavía lo recuerdo, estaba frío ese cuchillo, nunca olvidare esos ojos que no mostraban brillo, solo un reflejo opaco de mi carne siendo traspasada por esa cuchilla; sentía como se me nublaba la vista....

Muchos pensaran que en este tipo de situaciones se tiene miedo pero en realidad no sentí miedo, al contrario me sentí feliz de estar muriendo, de abandonar este mundo cruel y a la vez perverso y de la mejor manera, viéndolo sacar sus afilados colmillos(Osea su maldad)...

Ahora en este momento no tengo nada de que preocuparme, estoy con mi familia, todos están llorando, es mi funeral, siento que soy libre de hacer cualquier cosa pero... Por alguna razón no puedo salir de esta caja, bueno la ventaja es que ya no hay sufrimiento ni dolor por que ya no siento nada solo me queda mas que dormir y tal vez en algún momento despertar y volver a cumplir este ciclo, nuevamente y tal vez solo tal vez sonreír me ayude a que esto no se repita.