Después del estrepitoso fallo que tuvieron los mercenarios al cazar a Joshua, por mera suerte Carmak mientras peleaba con los cazadores consigue las plumas de un fénix lo cual es un ítem carísimo y sumamente raro.
Vender esas plumas no es algo fácil, son tan caras que no los pueden vender en cualquier local de hechicería además no es muy legal que digamos comerciar algo que perteneció a un animal mítico en peligro de extinción.
Así que el único lugar donde pueden vender eso es en El gran bazar lugar donde se venden o contrabandean todo tipo de cosas prohibidas o robadas, es uno de los lugares más escondidos a los ojos de los reinos o toda ley conocida. Pero también es uno de los lugares más peligrosos del mundo, con los peores asesinos y criminales que hay, al ser un lugar sin ley es como una Sodoma o Gomorra para mercaderes.
Entre la multitud de gente, rodeada de quioscos con mercaderes muy insistentes y estruendosos ruidos de diversos animales y personas, están los mercenarios algo irritados por el ambiente combinado del estrés de que los pueden atacar en cualquier momento.
-ok recuerden lo que dijimos en la guarida, nos dividiremos de dos en dos, por nada en el mundo gasten más de lo innecesario y Carmak por el amor de Dios... no robes a nadie – dice Vezzerian
-si, como digas aburrido – dice David
-si claro como sea – dice Anz distraído con los mercaderes
-oh vamos Vezz, puedo controlarme – dice Carmak que ni él se lo cree
Todos ven a Carmak de forma sarcástica – David tu ve con Carmak y yo con Anz – dice Vezzerian
-¿y por qué debo quedarme con el cleptómano? – dice David reclamando
-¿prefieres quedarte con el gigante de hierro adictos a las compras? – responde Vezzerian mientras apunta a Anz que ya se separó del grupo y está gastando su dinero en estupideces que le vende un mercader
David piensa un poco y realmente ninguna de las opciones suena bien así que lo deja al azar – hagamos esto si te gano en piedra, papel o tijeras te quedas con Carmak ¿aceptas? – dice confiado
-¿acaso yo no tengo voz en esto? – dice Carmak indignado
-¡no! – dicen ellos dos al mismo tiempo. Vezzerian piensa un poco y acepta la apuesta. No pasan ni diez segundos cuando David había perdido.
-siempre eliges piedra – dice Vezzerian con una leve sonrisa en su rostro
-¡la piedra es la mejor opción! – dice David
Los mercenarios se han separado para encontrar los mejores locales de hechicería, cada pareja tiene dos plumas y deben cuidarlas con su vida.
Anz y Vezzerian caminan por el concurrido camino de mercaderes, pasando por todo tipo de tiendas con los vendedores gritándoles prácticamente al oído que compren sus mercancías.
Vezzerian no le cuesta ignorarlos, nada de lo que tienen le interesa solo quiere vender las plumas e irse de este ruidoso lugar, en cambio Anz es presa fácil de las ofertas y se detiene en cada quiosco.
-Anz apenas llevamos 5 minutos aquí y ya compraste en diez lugares diferentes – le reclama Vezzerian
-todo lo que compre es útil y clave para nuestros trabajos – dice Anz en su defensa
Vezzerian lo ve con esa enrome bolsa llena de cosas inútiles que compro, arquea una ceja y lo mira de arriba abajo y le dice - ¿enserio, como cuáles?
-como este pulidor de armaduras, el afilador de cuernos, este jarrón para decorar la casa... ah y esta bonita bolsa para comprar más cosas – dice Anz en un tono alegre mientras escarba en su bolsa llena de cosas
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Ridiculous Fantasy
Fantasyun grupo de mercenarios con dudosa moral se embarcan en distintas aventura arriesgando su vida con el pretexto de conseguir dinero.