Me parece inconcebible, desconcertante y
aterrador el desmesurado dominio que
goza saturno actualmente.
Reiterando melodías previas, espirales
retornan, me gobiernan, me asfixian, me
aplastan hasta componer fragmentos,
gozando y solemnizando con notoriedad
en extraordinarias magnitudes.
Soy esclava detrás de estos barrotes que
se sitúan exactamente frente a mis
tinieblas, procuran delimitar cada ínfimo
movimiento que confiero conquistando
mis derrumbes.
Murmuran a través de la brisa
prolongándose con cautela a mis oídos
quienes perciben toda la indagación sin
debatir y fanatizando cada mínima
grafema.
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sin retorno
Poeziela cabeza es redonda para poder cambiar de dirección los pensamientos.
