Nuestra Última Vida.

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España, siglo XIX
•||Edad media||•

Nick era el rey de España de esa época, el se llamaba William II, estaba casado con la emperatriz Verónica McMillan de Inglaterra.
En esos tiempos para unir a las naciones enemigas tenían que casar a sus hijos para poder heredar el trono y formar un tratado de paz.

William no conforme con el "amor" que le daba su esposa, decidió mandar a buscar a la bruja.
Se hablaba por el reino sobre una mujer que contenía una gran belleza que dejaba a Afrodita por los suelos. Afrodita llena de furia le tiró una maldición, está maldición consistía en que la mujer con la gran belleza, fuera una anciana horrible, con el poder de ver un hilo rojo atado en el dedo de cada persona.
Quizás no sea tan horrible la maldición pero..cada vez que le diga a alguien sobre su persona destinada, está quedará maldita.

Cuando la anciana llega al castillo, William le dice que busque a su pareja destinada, pero ella se niega, William insistía y le dijo que si no lo hacía la iba a matar y a cada persona del reino, ella por el temor a sus palabras emprendió su rumbo a buscar a esa persona.

Hasta que llegó a el lugar más bajo de la capital de España, ahí vivía una madre con un bebé, este niño se llamaba Erick que en la actualidad es Alex , la anciana manda a llamar al Rey y este se decepciona tanto que le arrojó un vaso con agua encima a la madre, el vaso cayó en la frente del niño dejándole una gran herida en la frente. No suficiente con lo que había hecho manda a matar a la anciana y a la madre del niño.

Años después la emperatriz de España muere por una enfermedad dejando a William solo, meses después llega al castillo un chico en busca de trabajo y William lo contrata.
Este chico de a poco se fue ganando el afecto del rey haciendo que su personalidad cambiase y su humor también,  al poco tiempo estos dos se enamoraron tan perdidamente que en una noche de pasión Willian al levantar el cabello de la frente de este chico se percata que este tiene una cicatriz.

William le pregunta desde cuándo tiene esa cicatriz y este le contesta que desde que tiene memoria, no sabe exactamente como se la hizo ya que todavía era un bebé, William se paró rápido de la cama y salió de la alcoba, con una mirada perdida y sombría.

Días y días pasaban pero William y Erick no volvieron a hablar, Erick desesperado le demanda una explicación a William del porque su comportamiento así, y este le responde de una manera tan cruel que hasta una persona sin corazón lloraría, Erick abandonó el castillo y William no lo volvió a ver.

Los meses pasaban y William no dejaba de pensar en las palabras que le había dicho a Erick y sus últimas palabras antes de irse "Te amo, se feliz por mi", William mando a buscar al chico pero no lo encontró si no que días después lo hayaron en un río sin vida.

William sometido en el dolor, se suicida con sus últimas palabras "En nuestra siguiente vida reunámonos te juro que esta vez, te haré feliz".

Si tan solo William hubiera escuchado las palabras de la anciana quizás sus destinos no hubieran sido tan lamentables.