Capítulo 1: Bienvenido a Le Rose.

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La muerte es un castigo para algunos, para otros es un regalo, y para muchos un favor

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La muerte es un castigo para algunos, para otros es un regalo, y para muchos un favor.

Había pasado una año desde que Nicholas Renault se había ido de Le rose. Un año en el que todos habían podido respirar tranquilos pensando que nunca regresaría. Pero no pudieron estar mas equivocados Nicholas no solo había regresado si no que venia dispuesto a hacer pagar a todos aquellos que habían osado revelarsele.

Anabelle es la recién llegada hija del fallecido magnate Gregorio Rizzo. Con un gusto un tanto extraño y perturbador por los psicópatas. Algo que en un futuro podría traerle muchos problemas. Era una chica bonita, facciones suaves, surcadas por pecas la cuales le dan un toque hasta aniñado podría decirse . Ojos almendrados de  color gris intenso. De Complexión delgada y con una estatura promedio, acompañado de un largo cabello rojo como el fuego con algunos reflejos rubios, largo hasta la cintura.

Era bastante popular en Le rose, no porque ella así lo quisiese sino porque aunado a su claro atractivo físico era heredera de toda la fortuna de su padre. Un magnate italo-americano que había dedicado su vida al manejo de acciones en la bolsa de Nueva York, fallecido junto a su esposa en un presunto asesinato del cuál aún no se ha encontrado pruebas. Anabelle había quedado a cargo de un tío lejano que la había internado en ese lugar con las excusa de que era un colegio para gente con dinero y sumamente reconocido mundialmente, que contaba con una preparación de primera y conexiones con las mejores universidades del continente. Aunque a ella le parecía más, un colegio respaldado solo por el nombre, dado que su educación distaba de ser realmente especial. Algunas veces había intentando hacer saber su opinión, fue en ese momento cuando se dio cuenta que era ése tipo de colegios en los cuales todos tenían una forma de pensar  cuadrada y aburrida,  si no querías ser castigada por la madre superiora debías adaptarte. Cualquier pensamiento pagano seria castigado, debían recordar que Dios lo ve todo y por ende lo sabe todo.

Existían profundas diferencia sociales. Si eras becado o tenias unos padres que apenas si podían pagarte la colegiatura serías excluido y repudiado como si fueses una sucia rata. Luego estaban los nuevos ricos que no tenían modales y resultaban hasta un poco ordinarios podría decirse que  llegan a ser  desagradables, serian tratados de forma hipócrita e irónica dado que estarían tan hundidos en su propio narcisismo que eran incapaces de darse cuenta que los comentarios mordaces que escuchaban a su alrededor eran precisamente juzgando su tan cuestionable comportamiento. Por último encontramos las personas como Anabelle Rizzo, están por así decirlo en la cima de esa cadena alimenticia, ricos de cuna con grandes fortunas y posesiones de valores incalculables, este grupo estaba formado por hijos de ilustres personajes de la realeza o de grandes magnates como dije anteriormente con riquezas incalculables. 

Anabelle Rizzo era parte de un grupo grande, de personas en cual se encontraba uno que otro príncipe o princesa, hasta herederos al trono en sus lejanos reinos, pero a ninguno consideraba su amigo dado que desde adentro había visto lo hipócrita que podían ser en ese gran circulo en el cual todos hacían llamarse tu amigos. Anabelle sólo era un títere mas de sus compañeros por decisión propia apagó sus pensamientos de libertad y cambio, a aquél estricto régimen educativo, era mas fácil dejarse llevar por la corriente que recibir humillaciones por intentar ser diferente.

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