Again || Adriole ||

Capitulo 3.

— ¡Deténganse!

Se revolvió mientras duerme.

— ¡Didier! ¡Alto, no le hagan daño!

Chloe gruño tratando de ignorar el ruido de fondo. Tiene tanto sueño.

— ¡Papa!

Soltó una queja cuando sintió unos brazos levantarle, salió de la media inconsciencia después de que unos labios besaran su frente con una ternura que le extraño. Frotó sus ojos para sacarse el sueño de ellos y los entrecerró para mirar la pantalla delante suyo.

Su papá.

El Rey André le devuelve la mirada, sus ojos brillan con un alivio casi aplastante. Su sonrisa tambaleante se ensanchó un poco cuando Chloé parpadeo sorprendida. No puso que hacer hasta que un sollozo la sacó de su estupor.

— ¡Didier, Silvain, señor Berger! — exclamó al ver a sus salvadores ser retenidos contra el suelo.

El señor Berger mira a sus hijos preocupado, Silvain se sacude en el suelo para liberarse de los guardias y Didier llora asustado. Chloe como pudo salió de los brazos de su papá, ignorando las quejas preocupadas, y corrió hasta ellos.

— ¡No los lastimen! — ordenó a los guardias, ellos vacilaron al verla tan seria. — ellos me ayudaron, no es manera de tratar a mis invitados.

Los guardias miraron el Rey con preguntas en sus caras, el Rey André asintió sin despegar la mirada de su hija. Quien a pesar de su estados maltratado no vaciló en ayudar a los niños. Berger los alcanzo en un parpadeo, rodeo a sus hijos con los brazos y le sonrio a la princesa.

Para que el Rey y sus guardias los hayan encontrado significa que su magia ya está activa, se concentró lo suficiente para sentir la magia latir dentro suyo como una caricia. Pudo haber largado a llorar ahí mismo sino se hubiese retenido.

— Chloé.— llamo André, camino hasta ella y se puso de puntillas. La atrajo a un abrazo aplastante. — estaba muy preocupado por ti, tenemos que llevarte el castillo.

— Yo... — Chloe quiso quejarse, quiere quedarse para que la familia Berger reciba algo por ayudarla. En cambio, la mirada de su papá le hizo cambiar de decisión. Asintió con la cabeza y se dejó levantar.

André la acomodo en sus brazos para que pueda abrazarle el cuello y enterrar su cara en su hombro. Fue una sorpresa que se derritiera en la seguridad que le brindó, relajada por completo no dejó que sus pensamientos vagaran mucho.

Retuvo sus lágrimas mientras siente como André ordena a sus hombres y agradece a Jerome. Golpeo suave el hombro de su papá, no hace falta decir que su papá se paró a mitad de palabra e inclinó la cabeza para escuchar.

— Ellos me ayudaron papi. — susurró, el Rey soltó un 'Mmm' de acuerdo. — que reciban algo.

Los brazos que la sostienen se tensaron, al parecer la mente de su papá está a mil por segundo, sorprendido, asustado y obligado a mantener la compostura. Si se cuestionó el cambio de actitud — aunque sea con un solo pedido, considerando que es a favor de alguien más.— no lo dijo en voz alta. Solo la abrazo más fuerte.

— Está bien.

Chloé desconectó de su mente lo que siguió después, quiere seguir durmiendo, su cuerpo está agotado y acostumbrándose a la sensación de la magia palpable en sus manos. Abrazo más al Rey mientras su propio pelo sucio se balancea por el viento.

Destello de lo que fue el último momento vivo de su papá en su otra vida pasaron por su mente. Apretó sus labios en una línea. El Rey André está vivo, vivo y bien.