"Lejos de ti" By AndyMin

Capítulo 4 - 🔞Quédese conmigo

P’Aof quería mucho a Saint por lo que no dudo ni un segundo al darle la llave cuando el joven pasó por su casa, ni siquiera le pregunto el motivo por el cual la quería, tan solo se la entregó y se despidió agitando su mano muy emocionado.

El reloj marcaba las 9 de la noche cuando Saint llegó al departamento de su mayor, abrió la puerta con mucho sigilo para evitar que Zee lo escuchara, al ingresar notó que el dueño no había llegado, lo cual lo hizo enojar aún más de lo que ya estaba, sin pensar demasiado fue directo hacia la habitación, se sentó en la cama a la espera del mayor.

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Con toda la diversión de la tarde a Zee se le habían pasado rápidamente las horas, vio su reloj mientras ingresaba al departamento “10:30pm”, una gran sonrisa dibujaba su rostro, dejó las llaves en la mesa de la sala para después sacarse la chaqueta y lanzarla a uno de los sofás, fue directo a su habitación.

—¡Saint! —Grito al momento de encender la luz y encontrar al hombre sentado al borde de su cama. Sus manos inevitablemente sudaron sin embargo respiro aliviado al reconocer al menor, tratando de disipar el susto causado se llevó la mano derecha al pecho masajeando esta parte de su cuerpo.

—Creo que paso un muy buen rato con Bass para regresar a esta hora—murmuro agudamente levantado la cara mirando duramente a la persona a la que prácticamente se le había confesado—dígame ¿se lo cogió tantas veces? —preguntó mientras se levantaba de la cama y caminaba hacia el mayor de manera amenazante.

Zee frunció el ceño por aquella pregunta —¿Qué? — inquirió aturdido por la rudeza en las palabras del menor —¿De qué carajos estás hablando Saint? ¿por qué estás aquí? — termino de preguntar cuando estuvieron frente a frente, por un lado, Saint era consumido por los celos y por otro Zee enojado por los comentarios del menor— Y para tu información Bass y yo…

Saint no quería oír que había sucedido, una de sus manos tomo de su cuello tirando su cuerpo hasta unir sus labios, beso al mayor con mucha fuerza apoderándose de sus labios, vertiendo todo sus sentimientos en cada movimiento, Zee apartó de inmediato al menor tomándolo del rostro antes de que pudiera decir alguna palabra, el menor lo volvió a besar, fue un beso corto antes de alejar un poco su rostro —P’Zee…—su voz baja y seductora llego a los oídos del mayor— tómeme... — la mano en el cuello se movía en una lenta caricia— tómeme aquí y ahora… — rozo sus labios a los del otro hombre—ámeme como antes… por favor…— suplico mirando fijamente a Zee.

—Saint…— la voz de Zee fue ronca, trago saliva conteniendo sus instintos, haciendo uso de sus manos separó a Saint tratando de no ser brusco, tomó una distancia prudente para poder aclarar su mente, no entendía el porque Saint actuaba de esa manera, cerró los ojos para ocultar cualquier emoción, con la mayor neutralidad dijo — mira… no sé lo que te pasa…— lo miro nuevamente— vete de mi departamento. Con esto no se juega…—señalo— no juegues más con mis sentimientos Saint…

—¿Quién dice que estoy jugando? — respondió. Una coqueta sonrisa apareció en los rosados labios del menor, quien mirando de manera retadora al mayor, elevo una ceja al tiempo que sus manos tomaban su camisa quitándose aquella prenda sin el menor atisbo de duda, permitiendo que los ojos del mayor vieran su esbelto y pálido cuerpo, tiró la prenda en el suelo —Lo digo en serio…— sus manos diligentemente soltaron el botón del pantalón y bajaron la cremallera, sin dejar de mirar a Zee mordió su labio inferior de manera provocadora, un ligero gemido reverbero al tiempo que se deshacía del pantalón, con la respiración  acelerada y sin desviar la mirada pego su cuerpo al del mayor, abrazando por el cuello, besando su barbilla levemente antes de apoderarse de  sus labios, succionando el labio superior, luego el labio inferior, besándole varias veces antes de ronronear —quiero que me haga gemir esta noche Phi…—su lengua delineo ligeramente el labio del mayor— quiero que me haga suyo tantas veces que no pueda caminar…—rozo su cuerpo al del mayor al tiempo que lo volvía a besarlo fugazmente—quiero gritar su nombre hasta que mi garganta arda…—con la misma fuerza con la que inicio aquellos besos  se  giró pegando su espalda y nalgas al cuerpo del mayor contorneándose levemente contra él, con la seguridad y  pasión  embriagando su cuerpo, dio unos pasos hacia delante mostrándole su cuerpo semidesnudo, mirando por encima del hombro al mayor, con una ladina y seductora sonrisa, se movió de manera sutil hasta quitarse el bóxer negro, dejando ver su bien formado trasero, nuevamente se pegó al cuerpo del mayor para frotarse sobre el miembro ajeno.