Capítulo 8

56 6 0
                                    

Lo volví a ver y nos volvimos a reencontrar, esto será el destino, pero uno muy cruel ya que somos medios hermanos, compartimos lazos sanguíneos. De seguro y a comparación de él, yo siempre lo ame y aunque sabía que él no me amaba a mí, acepte ser la segunda. Ahora el saber que somos medios hermanos me deja un hueco en el estómago. Soy Anastasia Morris, a partir de ahora Morris, por ser hija de uno de ellos y no por estar casada con uno de ellos.

Tres años atrás...

Había decidido ir a buscarlo, para poder acercarme poco a poco a él e intentar retomar nuestra relación. Pero mi madre me detuvo para contarme una verdad. Siempre creí que mi padre había muerto en un viaje de negocios o eso me hacía creer mi madre, aun así, no me quejaba ya que no sería la primera ni la última persona sin padre.

Crecí creyendo esa realidad y cuando llegue a la universidad, lo conocí a él, conocí a Leonardo, de quien me enamore a primera vista, sin pensarlo dos veces decidí intentar de todo para que él y yo estuviéramos juntos como pareja, incluso llegar mas lejos si eso era posible.

Pero cuando quise presentarlo a mi madre formalmente, ella se quedó helada, todo el color de su cara se le había ido para verse pálida, ese día me confeso la verdad, me enoje mucho, pero mas me dio rabia el saber que no podría estar con él de esa manera en la que había soñado y en un arranque de amargura me fui con las chicas a un antro.

Por supuesto las chicas no sabían que él era mi posible medio hermano así que no las culpo por lo que hicieron, me fui con la intención de olvidar todo y que mejor que descargarme con el alcohol.

Inicio Flash Back

Anastasia no debes tomar mas, ya estas ebrias, déjalo ya – Me decía una de mis amigas, a lo cual no le hice ni caso, seguí bailando, pero vi como ella se acercaba a Leonardo ¿Cuándo había llegado él aquí? No me importaba solo quería olvidarme.

Pero no podía, Leonardo no ayuda estando aquí ¿Qué debo hacer? Le digo la verdad o no ¿Qué hacer? – Ve tras él amiga – Me empuja mi amiga y yo como niña pequeña hago caso y me dirijo a la mesa donde se encuentra él, sin pensarlo ya cerca de él lo beso con todo el amor que sentía por él, Leo, mi Leo, así lo llamaba.

Estaba preparada para su rechazo, pero no llego ya que el intensificaba mas el beso, incluso me agarro de la nuca y me acerco mas, a estas alturas ya me encontraba sentada encima de él, besándonos con hambre, pero todo se acabó cuando llamo a otra persona – Melany... te amo – Sentí que mi mundo se vino abajo.

Si, soy yo, tu Melany, solo tuya – Seguimos así hasta que el aire nos faltaba, es cuando él se me levanta y me dice – Vámonos a otro lugar, solo nosotros dos – Sin vacilar le tomo la mano y nos vamos a un hotel, llegando a la habitación del hotel.

Comienza a besarme desesperadamente y quitándome la ropa, de la misma manera le correspondo besándolo y quito su molesta ropa, ambos quedamos totalmente desnudo, ya en la cama ambos comenzamos acariciarnos pero él seguía nombrando aquel nombre – Melany, no sabes cuánto te deseo – Me besaba y acariciaba mis pechos – Te hare mía, solo mía – Yo aunque estaba celosa de que llamara a otra chica que no fuera yo, a la que estaba besando y tocando era a mí, el seguía chupando y saboreando mis pechos mientras se posicionaba entre mis piernas para entrar en mí, es ahí donde me mira solo para decirme – Di mi nombre – a lo que yo gustosa lo llamo – Leo – El me sigue mirando con sus ojos llenos de deseo y pasión – Dilo nuevamente, esta vez sin pensarlo digo su nombre junto a otras dos palabras añadidas – Leo... te amo – Es donde siento un dolor punzante en mi zona baja, si él había entrado en mí, comenzó lento ya que no quería lastimarme, pensando que era su nada Melany pero luego subió la intensidad de sus movimientos y nos venimos juntos.

Esa noche nos habíamos entregado uno al otro, esa noche perdí mi virginidad, y poco me importaba si salía embarazada de él, porque me había dado cuenta que no habíamos usado protección y a pesar de ser medio hermanos no me arrepentía de lo que paso.

Fin Flash Back

Al día siguiente en la mañana, me había levantado temprano, me encontré con él desnudo en la cama, me fui a tomar una ducha y me vestí, al parecer él tenía el sueño pesado y me había marchado del hotel. En el camino me encontré con un asistente del personal, le dije que no dijera nada, aunque el preguntara, pero tuve que darle dinero a cambio de su silencio.

Creí que solo se quedaría como un recuerdo, pero grande fue mi sorpresa cuando después de mes y medio no me llegaba mi periodo, entre en pánico y me hice una prueba de embarazo, al ver aquel objeto tenía dos rayitas, si estaba embarazada de Leo, tendría un hijo de mi hermano.

Antes de que mi madre se diera cuenta, me fui de la casa, para suerte mía, ya estábamos graduados y con trabajos, así que podría mantener a mi hijo, mi madre nunca supo hasta después de un año que ya era abuela, tenía miedo que se enterara mas por saber quién era el padre, pero me alegro mucho el saber que quiere mucho a su nieta pero siempre está la pregunta ¿Quién es el padre de tu hija? Bueno sin duda es Leonardo.

Pero lo había decidido hace mucho tiempo, cuando tuve a mi hija en brazos, no le diría a Leo que tuve una hija de él, sabía que algún día se sabría que seriamos hermanos, aunque albergaba una pequeña esperanza de que no fuera real, afortunadamente mi hija es una niña sana.

Ahora después de tres años, es una niña adorable, es mi razón de vida, pero veo que cada vez se parece a su padre, solo espero que nunca sepan que mi hija, no sé de lo que sean capaces de hacer la familia, mi padre sabe que tengo una hija y claro lo confirmo la prueba de sangre.

Afortunadamente solo han hecho la prueba para saber si pertenecemos a la familia, aunque ahora poco me importa, debo superar mis sentimientos hacia Leo y proteger a mi hija de todos ellos. Tengo la intuición de que algo malo nos pasara si seguimos aquí o mantenemos contacto con ellos, así que con el dolor de mi corazón me iré callada sin decir nada a nadie.

Anastasia ¿ya te vas? – Solo asiento al saber quién es - ¿Por qué no me dijiste que tenías una hija? – Se me acelera el corazón, seguro mi padre hablo – No es para tanto, es mi responsabilidad – El termina asintiendo para luego abrazarme – Discúlpame por todo, ahora que se que eres mi hermana me arrepiento de todo lo que hicimos – No, por favor no lo hagas, se separa de mí un poco para verme – Por favor, olvida todo lo que paso entre nosotros – Yo termino asintiendo y luego me abraza de nuevo para luego despedirse y dejarme a mí con un dolor en el corazón ¿Cómo olvidarlo? Si tenemos una hija, prueba de lo que paso entre nosotros, comienzo a llorar diciendo – Leo.... Te odio – Y sin mas me voy esperando no volver jamás ni cruzarme con ninguno de ellos.

¿Quién es el Ceo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora