Tres

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Las piernas comenzaron a temblarme a medida que me iba acercando más y más.

¿Estará habitada la casa? ¿Vivirá algún familiar allí?

Y de ser así... ¿podrán contarme algo sobre Jin y Tae?

Sí, ya hasta les tomé cariño.

Me planté delante de un gran portón de madera. En él una gran placa rezaba "Rakkojae Seoul (Bukchon Hanok Village)".

¿Será un hotel? Un hotel no son buenas noticias... no para mí, pero al menos, el edificio no está abandonado.

La puerta está totalmente cerrada. Toqué el timbre rápidamente, y esperé un buen rato hasta que un joven adulto asomó su cabeza bastante molesto porque toqué como cinco veces seguidas el timbre.

—No prestamos el baño a quienes no estén alojados, niño.

—¿Eh? No necesito un baño...

—¿Buscas una habitación?

—¡No! ¡Busco respuestas! Y tal vez... usted pueda ayudarme.

El chico me miró con total desconfianza, como un gato dormido y malhumorado, y cerró fuerte la ventana.

Okay, listo... hasta acá llegó mi esperanza.

¿Ahora dónde voy? ¿Qué le digo? ¿Vuelvo a tocar timbre?

Cinco minutos y se asomó nuevamente.

—¿Traes dinero?

—Eh... sí...

Cerró otra vez y vino inmediatamente a abrir la puerta.

—Muchas gracias... estoy haciendo... un trabajo para la universidad...

Lo único que se me ocurrió.

—¿De qué...? ¿Ironman?— alzó sus cejas.

Mal momento para haberme puesto mi remera favorita hoy. Me tapé con mi abrigo y seguí hablando.

—Es sobre la Guerra de Corea. Me han dicho que aquí vivió la familia Kim... una de las familias más adineradas. ¿Es así?

—Sí... puede ser...— me hizo señas para que le dé dinero.

Le dí un par de billetes.

—Sí... este edificio perteneció a ellos durante generaciones.

—O sea... ¿Tú eres descendiente de ellos?

—Sí, aunque mi apellido es distinto.

Bueno señores, acabo de encontrar a Min YoonGi, nieto de HoSeok, el hermano de SeokJin.

En ese momento, decidí contarle lo de la tumba sin que me tiemble la voz. Ya que es un "trabajo de estudios universitarios" y él asintió.

—Sí, los enterraron juntos... pero... no sé por qué.

Vuelvo a mirarlo y sigue relatando.

—Me han dicho que eran amigos, asistían a la misma escuela.

Bien, está claro... ellos se conocieron cuando eran adolescentes o quizás antes, y tal vez su amistad se forjó en los pasillos de ese edificio.

Una amistad que se truncó cuando Jin se fue a la universidad y Tae se quedó.

Por eso, él pintaba la casa de SeokJin, porque lo echaba de menos.

Incluso, un año después de su separación, le seguía dedicando cuadros.

Pero... ¡ellos están enterrados juntos! ¿¡Cómo es que no sabes el por qué!?

Love Is Not Over [TaeJin] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora