Little

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Daniel

Desde que tome el liderazgo del infierno las cosas con más tranquilas por aquí, pero más pesadas para mí, hay veces que aún me retan los demonios, hay otros resignados, estoy harto de pelear con los Shadows así que advertí que cualquier ataque en su contra merecía la muerte, el último castigo que hubo fue cuando lastimaron a Ariadne, desde entonces no he visto a Clary, enterarme que es mi hermana me dejó muy afectado, no lo imaginaba, no lo sentía de ese modo, cada que la besaba antes se sentía tan bien, tan cálido, tan estable, pero sé que cuando se fue también la regué metiéndome con otras chicas, ya no siento esa conexión que sentía, ella me alejaba cuando podía, incluso no se quiso quedar conmigo aquí, decidió irse con Ariadne, Alex y todos ellos, no la detuve, así como abrí las puertas para todo aquel que quisiera irse con ellos, Fausto y Clara obviamente fueron con ellos, creo que su vínculo había crecido ahora que mi padre los tenía encerrados.
Tengo que admitir que no me gusto que muriera de esa forma, tan cruel pero sé que se lo merecía, había causado mucho daño y más a su familia, incluso a la de Clary, nadie se merecía eso.
He querido ir a ver a Clary, pero no sé si quiera verme, de ser así ya habría venido ¿No?
¿Que se supone que haga ahora? Ahora que Ariadne se hizo a un lado tengo que recuperarla pero no sé si sea correcto, no es del todo mi hermana pero...mierda no sé qué hacer

Ricky

Abrí los ojos y lo primero que vi fue una luz, no, no estoy listo para ir a la luz, no aún ¿Dank? ¿Dónde está Dank? No está, no lo encuentro por ningún lado, siento que grito su nombre pero no me oigo ni a mí mismo, pude mover mi mano y ¿Qué es esto que está en mi cara?

-oye tranquilo- esa voz ¿De quién es esa voz?-estas bien, ¿Puedes verme? Estás seguro aquí -entre en pánico yo solo podía ver esa brillante luz ¿Quién era esa persona?, Logré girarme y vi unos ojos claros, color café -hey ahí estás, tranquilo ¿sí? Todo está bien, estás a salvo aquí, estás en un hospital estás herido pero bien, nada que no se pueda arreglar, llevas unos días aquí, así que tranquilo -me sonrió y sentí un poco de tranquilidad, si quisiera hacerme daño ya lo habría hecho ¿Cierto? - traeré a la doctora para que te revise, no tardo- volvió a sonreír y se fue, comencé a ver todo lo que podía a mi alrededor, al lado de mi había una cama ocupada pero que estaba rodeada por una cortina de esas transparentes pero opacas que no dejan ver nada, una mujer de ojos verdes se acercó a mi

-Bien, despertaste, te voy a quitar la mascarilla ¿Vale?- asentí y ella quitó eso de mi cara y pude respirar mejor- ¿Recuerdas quién eres? ¿Me puedes decir cuál es tu nombre?

-Ri..ric..ky -dije con dificultad, parecía que no había usado mi boca para hablar en mucho tiempo, era una sensación muy extraña

-Bien Ricky ¿Recuerdas algo de lo que pasó? -¿Algo de lo que pasó? ¿Qué paso? ¿Dank? ¿Dónde está Dank?

-Da...Dank, esta- intercambio una mirada con el chico de ojos claro

-no sabemos nada de ningún Dank cariño, lo siento-mi Dank ¿Dónde está mi Dank? Una lágrima empezó a deslizarse fuera de mi ojo y otra y otra más-oye lo buscaremos por dónde te encontramos a ti, no debe estar lejos pero tranquilo ¿Si?-dijo la mujer muy tranquila, detrás de ella alcance a ver a ¿Alex? ¿Esa era Alex?

-A.. Alex-la mujer giro y la vio

-¿Se conocen?- asentí-deja la traigo contigo, espera un momento - la mujer se fue y al poco tiempo volvió con Alex

-hey cachorro-me sonrió -¿Pero qué haces aquí?-negué con mi cabeza

-los dejamos solos-la mujer le dio una última mirada a Alex y se fue

-¿Cómo estás?- me preguntó angustiada

-Parase que físicamente bien-dije aún con voz rasposa-pero mental no se

¿¡Enamorada!?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora