[[Cinco]]

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—¡que emoción!—grite desde mi cama al leer los mensajes que me enviaron mis nuevos amigos, que por cierto me incluyeron a su grupo, mandaban ubicaciones de los lugares a donde iríamos hoy, que realmente eran sorprendentes, me senté en mi cama tirando la frazadas hacia un costado y estire mis brazos junto a un bostezo, me puse mis pantuflas que por cierto me las había comprado recién, eran de Chimmy, un personaje animado que me encantaba demasiado, fui al balcón y corrí las cortina a ambos lados para dejar entrar el brillante sol que hoy estaba sumamente precioso, abrí la puerta corrediza de vidrio y sali a tomar el aire fresco y para nada contaminado, me sostuve del barandal viendo él vecindario — que hermoso sábado— los pajaritos cantaban mientras se perseguían uno con él otro, pasando de poste en poste en señal de cortejo, suspire bobamente viéndolos, deje caer mi cuerpo en la baranda como un tonto enamorado, que lindo debe ser que alguien te corteje, sentí mi corazón lleno de amor y cariño, listo para entregárselo a la persona que me amará, como si fuera un pan recién horneado y listo para entrega inmediata, bobo.

Mi vista se posicionó en la terraza de la casa en frente, una mujer mayor estaba ahí — Ella debe ser la Señora de la casa, o su madre — Sonreí, me reincorporé y la observe, tenía un bello rostro y bonitas facciones, aunque realmente no puedo ver mucho desde aquí, la distancia era mucha, pero lograba ver al menos un poco — Usted debe ser la madre —tenía un pañuelo en la cabeza, guantes de látex y un mandil rojo con estampados que creo son animales, parecía que haría la limpieza, se acerco a las macetas donde ya habían florecido muchos tipos de flores muy bonitas y de muchos colores, rojas, amarillas, violetas, rosas y las mas bonitas eran la blancas, aunque no gusto mucho de las flores, pero son la naturaleza y eso si me agrada, las regó con agua y luego detuvo sus movimientos —Creó que encontró algo— me puse en alerta como vieja chismosa y metiche, como si yo hubiera sido él culpable empecé a sudar, aquella señora sacó una coleta de cigarrillo de adentro de la maceta, y luego empezó a sacar más, y al final sacó toda la tierra junto a las raíces encontrando muchas colitas de cigarrillo.

—Oh dios, ahora si no te salvas —susurré en un tono divertido, por que si, me parecía divertido y gracioso, ella grito entonces hacia adentro de la casa, llamando a alguien con mucho enojó. — ¿Lo llama a él acaso?— me quede viendo la escena, la señora grito más y entonces vino la niña—ella.. Ella es muy bonita— tenía la piel muy blanca, ojitos algo grandes y cabello castaño largo y liso— Lo esta llamando a él, al alfa, o al fin podré verlo —me emocione y me dispuse a esperarlo ansioso, presione él agarre de mis manos hacia él metal redondo de las barandas que dejaron de ser frías por él calor y sudor de mis manos, la mujer grito más y parecía que alguien venia por que la señora tomó sus macetas y las acercó.

— ¡Jimin! ¡baja, necesito ayuda!

Escuche un grito que provenir de la planta baja.

"Oh, no, por favor ahora no"

La señora parecía cada vez mas eufórica teniendo su vista únicamente en la puerta que conectaba a la terraza con la casa de adentro.

"Ya saldrá, ya saldra"

Me mordí él labio ansioso, era de día, había mucho sol alumbrando todo a su tocar, y eso significaba que podría verlo, podría ver su rostro, estaba comenzando a emocionarme.

— ¡Jimin!

Volvió a gritar y solo hacia que me desesperará, el aun no salía, joder, no salía.

☪El Chico Del Balcón🌹ʸᴹ-ᴼᵐᵉᵍᵃᵛᵉʳˢᵉDonde viven las historias. Descúbrelo ahora