Mystery of love | Bakushima.

9 | Pero amarte a ti es un buen problema para tener.

Realmente no se sorprende cuando el receso de verano se acaba, incluso pensando que era demasiado pronto. Nunca fue exactamente largo, pero debe admitir a su disgusto que con su amiga allí se había vuelto más corto de lo usual —de alguna u otra forma, seguía siendo la primera persona que traía a su casa por tanto tiempo—; viendo películas durante la madrugada, probando recetas de cocina al azar o simplemente pasando el rato en el sofá o en cualquier otra parte. Se encuentra a sí mismo lleno de una sensación que no ha experimentado antes en su vida, ni siquiera en sus buenas jornadas de secundaria, cuando creía que su vida era perfecta, no podía volverse así de cercano al grupo que siempre caminaba a su alrededor. No estaba seguro de si es correcto que estuviese sintiéndose tan cómodo y pleno, a veces le inquieta ese hecho, como un recordatorio latente en su cabeza señalando todos los errores de su vida. Sin embargo, está bien, estaría bien.

Durante el viaje a la academia, Camie estaba dormida en el asiento trasero con auriculares en sus oídos, no era un tramo especialmente largo y su padre insistió en llevarlos en su automóvil. Ellos llegarían pronto y Katsuki admite que se siente ciertamente ansioso, pero no se trataba de las clases y las tareas, sino de una persona. Estaba nervioso por ver a Kirishima e incluso emocionado.

La última vez que se habían encontrado, fue en aquella fiesta que Camie organiza solo porque sí, no es sorpresa que a ella le gusten ese tipo de cosas y sus padres estuvieron tan alegres ante la idea —principalmente por él, supone— que dejaron la casa a su entera disposición. Ellos realmente hablaron en el jardín por horas y se había sentido fantástico, incluso irreal. Probablemente estaba comportándose como un completo idiota enamorado, pero así es y decide que quizás solo quiera dejarse llevar. Cuando conducen cerca de la academia, el sol ya sale y Katsuki está más despierto que nunca, jugando con sus pulgares hasta que el adulto al volante suspira con una pequeña sonrisa cansada y anuncia el final del viaje. Una extraña sensación de vértigo revuelve sus entrañas al ver la enorme y anticuada contrucción de ladrillos blancos. Las clases comenzarían dentro de unas horas y aún así muchos estudiantes llegaron al establecimiento tras ellos.

Camie no parecía contenta, cargaba con sus propias maletas cuando dejaron el auto. Su padre es más sentimental que su madre en este tipo de cosas, habían estado al menos veinte minutos despidiéndose—. Odio este lugar, necesito vacaciones.

—Las vacaciones acaban de terminar, idiota —respondió Katsuki, pero su tono fue dudoso, evidentemente estaba buscando algo por todas partes.

—Necesito más, obviamente —bufa Camie, volteando a observarlo por unos segundos y es suficiente para provocar que una risa se deslice—. Deja de ser tan obvio.

Katsuki trata de no sonrojarse —por supuesto, falla— y le envía a la muchacha una mirada fulminante antes de adelantarse.

No encuentra a Kirishima en la habitación que comparten, lo cual es una decepción. Estuvo buscándolo alrededor de los pasillos con disimulo, tratando de reconocer el cabello teñido de intenso rojo y la chaqueta verde del equipo de tenis, pero sus esfuerzos fueron en vano. Ni siquiera sabía lo que estaba haciendo, o que le diría al muchacho, simplemente quiere verlo y tal vez confirmar... Lo que sea. Su segunda opción era toparse con la muchacha con cabello de algodón de azúcar y hallar la manera de obtener la información que deseaba sin lucir como un obsesionado. Sin embargo, ella tampoco está en ninguna parte y una pequeña y paranoica parte de él cree que quizás ellos están juntos en este momento, no puede evitarlo. Se obliga a sí mismo a dejar de buscar —prefiere morir antes que convertirse en eso, honestamente— y en su lugar, comenzar a prepararse para otro tortuoso año escolar. Mina es la mejor amiga de Kirishima, debería saberlo bien, solamente no podía dejar de pensar en cuán perfecta era ella. Katsuki definitivamente odia esto.