El extraño suceso de Jung (HopeV) DE MI CUMPLEAÑOS

La noche de los dos

Cuarta noche

Para llegar a casa tenía que realizar un viaje de casi dos horas en autobús hasta el poblado que estaba a las afueras, esa razón le impedía quedarse más tiempo después de clases y socializar con sus compañeros que gozaban ir a los bares y a comer. No llegó a tener una amistad a lo largo tratando de restarle importancia, aunque por dentro se sintiera fatal, por eso cuando escuchó que lo invitaron al bar por un compañero no dudó en aceptarla, podría gastar un poco de su pequeño ahorro que ganaba los fines de semana para asistir y quedarse en una sauna a dormir.

Las cosas no resultaron como pensó, y descubrió que la invitación fue una de cortesía, porque se la pasaron ignorándolo varias veces. Sin ánimos quiso pasar el rato sin una gota de alcohol encontrando a su amor secreto allí, sus ojos se iluminaron y agradeció esa noche al encontrarlo.

Misma acción se repitió dos veces seguidas, quería verlo. Pero sus acciones fueron demasiado lejos que se sintió avergonzado después de haberlas cometió, era la causa de que estuviera de nuevo en ese bar esa noche.

Esta vez quería ver a Hoseok para disculparse y dejarlo en paz.

Lo observó bebiendo una cerveza con delicadeza y esa sonrisa que nunca desaparecía de sus labios, ni siquiera cuando estaba en estado alcoholizado, se veía más contento de lo normal queriendo saber la razón de las casi eternas risas, pero era imposible cuando no eran amantes, mucho menos amigos, eso le llegó como una punzada a su corazón, pero era inevitable cuando nunca tuvo el valor de acercarse al pelinegro en su estado consciente, aunque muriera por hacerlo.

No pudo acercarse a él hasta que sus amigos lo dejaron sentado en un sillón como si estar sentado le pasara el alcohol y lo mantuviera seguro. Lo vio acurrucarse tiernamente en ese espacio queriendo tocarle los cabellos negros que tapaban sus ojos.

—Jung... Quisiera hablar contigo —el pelinegro no se removió del lugar con sus palabras. ¿No podía estar muy alcoholizado o sí? —Jung...

—Quiero ir a casa...

Tragó saliva no queriendo acercarse más porque siempre que lo hacía Hoseok lo tomaba de la cintura para acariciarlo, tampoco quería imaginar cómo sus labios se sentían calientes en los suyos después que estuviera encima de su torso. Solo estiró un poco la mano entrelazando sutilmente sus dedos.

—Te llevaré para que descanses —se acercó ayudándole a incorporarse, esta ocasión fue un poco más sencillo. Solo lo llevaría al hotel, armaría una serie de palabras para disculparse y se iría, era un plan fácil —No puedo creer tus amigos te dejen alcoholizado casi siempre, no piensan que alguien puede asaltarte o que puedes hacerte daño a ti mismo sin supervisión —sacó un aire cansado cuando empujó el cuerpo de Hoseok dentro de taxi —Por favor señor llévenos al motel cerca —estiró la mano sacando un poco de dinero de su billetera para dárselo al taxista —Me queda poco para esta semana... pero será la última vez.

Depositó el cuerpo adormilado del pelinegro sobre la cama acomodando sus brazos a los lados, tocó sus cabellos quitándolos de su frente, admiró su bonito perfil un poco antes de buscar las palabras para disculparse.

—Jung... —afortunadamente el mayor se movió y se sentó con los ojos cerrados diciendo un "umh" como respuesta que lo escuchaba —Yo Jung... Lo siento, lo siento mucho, no debí aprovecharme de ti estando ebrio, te juro que no fue mi intención, solo que... cuando me lo pediste no pude negarme. Sabes... me gustas —tomó una hoja de papel y una pluma que estaba en la mesita del hotel para escribir su disculpa —De verdad lo siento, escribiré mi disculpa para que la veas y me iré... Hoy es la última vez que te tengo aquí.