días después
los chicos se encontraban bailando en su sala de práctica. habían estado preparándose para su comeback, lo que les emocionaba mucho.
minho estaba a cargo de corregir errores y asegurarse de que todos estuviesen coordinados. mientras estaban en su descanso, revisaba la grabación que acababa de hacer, concentrado únicamente en la pantalla de su celular. o eso aparentaba.
disimuladamente, alzó su mirada para buscar la del líder, chan, y una vez se encontraron, éste le hizo un gesto afirmativo. llegó la hora. minho aclaró su garganta y habló.
— jisung, ¿podrías pasarme una bandita? hay algunas en el baño de esta habitación.
el nombrado lo miró, intentando mantenerse más serio. algo confundido, solo asintió, dejando a hyunjin y felix para ir a ver lo que le había pedido su hyung.
apenas lo perdieron de vista, todos empezaron a dejar el salón apresurada y silenciosamente, a excepción de minho. el último en salir fue chan, no sin antes apretar el hombro de su menor, brindándole una sonrisa de aliento.
lee suspiró. estaba nervioso. había planeado todo esto junto a los demás, ahora solo esperaba una reacción positiva de han. o al menos, esperaba no empeorar las cosas.
justo cuando acababa de cerrar la puerta, apareció el menor, quien permaneció inmóvil al otro lado de donde estaba minho.
— ¿dónde están los demás? —preguntó han.
— están aquí mismo —respondió divertido el contrario— ¿no los ves?
jisung sonrió, solo un poquito, pero lo suficiente como para que minho lo notara. tosió como para disimularlo, volviendo a su semblante serio.
— yo, debería irme también, hyung. aquí está su bandita.
una vez se la entregó, intentó escapar de ahí. pero minho fue más rápido. le tomó por su muñeca y lo acercó a su pecho, envolviéndole en un suave abrazo.
— espera —susurró el mayor—, déjame hablarte.
— hyung.
— ¿por favor, hannie?
el nombrado sintió su estómago revolverse, minho no tenía idea de cuánto le gustaba que lo llamara así.
aún escondido en su pecho, jisung asintió sutilmente.
