Salgo de la ducha a las once, voy a mi habitación y me visto con unos pantalones vaqueros de talle alto, una camiseta azul turquesa con vuelo y una chaqueta de cuero negro, me calzo unas botas negras de tacón medio-alto y me maquillo un poco, termino de pintarme los labios cuando miro la hora en el teléfono y veo que ya son las doce menos diez.
-¿Dónde vas a ir? -pregunta Andrea curiosa.
-He quedado con Will -digo.
Andrea emite un quejido y me giro para mirarla.
-Vístete, vas a venir conmigo.
-No, tranquila, no quiero molestar.
Voy a mi parte del armario, agarro una camiseta rosa igual a la mía y unas sandalias de tacón bajo.
-Ponte esto y unos pantalones negros -digo dejando la ropa en su cama.
-Abby -dice.
-Tienes -miro la hora en el móvil "23.52"- siete minutos.
Andrea se ríe y se viste, se pone sus gafas de pasta negras y me doy cuenta de que disimulan el verde de sus ojos.
-Date la vuelta -digo.
Agarrro una goma y le hago a Andrea una cola de caballo alta dejando un par de mechones de su flequillo, la miro de frente y le quito las gafas un momento.
-Abre bien los ojos -digo.
Agarro la máscara de pestañas de encima de mi cómoda y le pinto las pestañas, agarro un labial rosa suave y le pinto los labios sin marcar el color artificial. A las doce en punto, subimos en el ascensor.
-No sueles maquillarte ¿verdad? -digo al ver que no hace más que mirar su reflejo en el teléfono.
-Perdón -dice cohibida.
Me río.
-No tienes que disculparte, lo cierto es que eres perfecta con y sin maquillaje.
Andrea me sonríe y salimos del ascensor. Llegamos al parking de la residencia y busco a Will con la mirada.
Le veo apoyado en un coche, le doy un toque a Andrea en el codo y vamos junto al chico de ojos verde claro.
-Creí haber dicho que vinieras sola -dice.
-Dijiste que fuera puntual -digo.
Will mira su móvil y abre la puerta del coche.
-Subid.
-Solo hay un asiento -dice Andrea.
Yo estaba pensando exactamente lo mismo.
-Yo me siento en tus piernas -le digo a mi compañera de habitación.
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Antes de ti
RomanceHuir del pasado nunca había sido tan difícil para ella, ni tan fácil para él. Nicky estaba convencida de que huir era la mejor forma de evitar los problemas y Ry podía haber jurado de nuevo que era el chico que no se enamoraba. Pero al parecer, a el...
