luv, you heal my heart

1.3K 137 32
                                    

Todo era tan incomodo, era como si una nube oscura lo estuviese siguiendo diariamente a donde sea que fuese, y un día malo se extendió a una semana.

«—Te amo. — dijo repentinamente JungKook y la mente de TaeHyung se volcó, sus labios simplemente no dejaban soltar nada y sólo miro fijamente al mayor.

—Creí que ya lo habíamos aclarado...— logró formular. Su mente aun estaba algo nublada.

—TaeHyung, no puedes vivir así. Sé que sientes lo mismo, por favor, contestame.

Ambos se miraron nuevamente, el mayor se acerco y beso sus labios como si fuese la ultima y primera vez. Moviendo sus labios lentamente, saboreandose el uno al otro, bailando su propia canción. —Te amo. — volvió a susurrar JungKook. — Te amo, te amo, te amo como nunca he amado a nadie.

—J-jungKook... ¿Podrías irte? Yo... Luego te daré una respuesta.»

Se había pasado el fin de semana en su cama, sin comer y solamente mirando el techo de su habitación. Su madre había ido varias veces a verlo, preocupada de que estuviese tan apagado, pero siempre que iba pretendía estar dormido o inventaba una tonta excusa. Su madre no era tonta, había visto su rostro al mirarlo, ella sabia todo. Ahora era lunes, y debía ir a clases.

Se levanto en su horario regular de semana, apenas se arreglo y su madre no dijo nada, se iba a ir sin desayunar pero ella se acerco hasta él con una pequeña lonchera y beso su frente antes de irse. No se atrevía a mirar el rostro de su hermano, simplemente se fue antes.

El trayecto fue tan tranquilo como solitario. Y cuando comenzaron las clases, se forzó a si mismo a ignorar todas las miradas juzgadoras a las que, tal vez, ya debería acostumbrarse.

“¿Qué le pasa al estúpido de Kim?”

Sus amigos se habían acercado a él para invitarlo a salir luego de clases, los rechazó diciendo que tenía muchos pendientes. Y, a pesar de que sabía que los que hablaban sobre él en voz alta lo hacían a propósito, comenzó una pelea.

—¿Podrías dejar de balbucear y hablarme a la cara? Me zumban los oidos.

—Sólo decía que parece que haz tenido un mal fin de semana ¿No te han jodido lo suficiente, Kim? — el chico sonreía sonreía como si estuviese orgulloso de el mismo.

Los pasillos estaban vacíos. La verdad ni siquiera recordaba el nombre de aquel imbecil, pero parecía un chico promedio de su edad. Se acercó a él, apoyando sus brazos en los hombros del contrario. —¿Y? ¿Por qué te importa tanto lo que haga o deje de hacer? ¿A caso quieres ofrecerte?

El chico se puso nervioso y TaeHyung quiso reír. Comenzaron un besos sucio y rápido, que terminó con él contra la pared, siendo sostenido por él hombre que no era JungKook. Sintió como la lengua del que seguía sin ser Jeon se deslizaba por todo su cuello y clavículas, mordiendo de vez en cuando.

Gimió y casi lloro de la frustración. Por hacer eso, ser consciente y aún así no parar. Folló con él en los baños. Cuando él se fue, se quedó mirando su reflejo en el espejo, frente al cubículo en el que había descargado su frustración de la peor forma posible. Se sentía culpable. Sucio. Asqueado.


Volvió a su casa y ni siquiera se molesto en sacarse el abrigo, fue directo a su habitación a tirarse en su cama. Su vista se deslizó a su mochila que había tirado descuidadamente. Se acerco a ella y comió lo que le habia dado su madre, le sabia a nada y a todo al mismo tiempo, era simplemente gyeranmari con arroz y un poco de gimbap, que al verlo lo llevó nuevamente a su infancia.

Doctor JeonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora