Cambios

Predicción.

Homeworld había cambiado tanto desde que Steven había cambiado la mente de todos, especialmente de White. Miro por afuera de su ventana a todo Homeworld, miro a las perlas caminando de un lado a otro sin nadie que les dijera que hacer.

Algunas gemas contentas habían dejado atrás el sistema y habían empezado a vivir y hacer lo que ellas quisieran, otras habían estado bien con su trabajo y se quedaron en el mismo trabajo solo que con un trato mejor claro está.

White miro todo Homeworld, la Era 3 estaba progresando de una manera maravillosa, todo gracias a Steven que logro que ella cambiara de parecer. Miro con una pequeña sonrisa todo aquello que estaba ahí enfrente de sus ojos.

Avanzó entre los pasillos de su “Departamento” como lo había llamado ahora Yellow, lo que antes fue un lugar blanco sin sentimientos ahora brillaba aún blanco pero con una calidez nueva, una calidez que tenía milenios sin sentir.

Camino aún más entre los pasillos hasta que llegó a la parte donde ninguna gema tenía permitido ir e incluso ya nadie podía recordar siquiera que existía tal lugar. Los pasillos dejaron de verse tan modernos y empezaron a verse algo antigüos pero aún así majestuosos como solo lo de un diamante podía ser.

A el igual que lo moderno el color fue cambiando, ya no era un brillante blanco, si no un suave color crema algo suave casi con un toque algo rosado en el, White Miro con nostalgia los dibujos de la pared, contaban la historia de un diamante y su aporte a las gemas, de un diamante y su gloria.

Camino y camino hasta que topo en las dos grandes puertas que ahí estaban con la imagen de un diamante sosteniendo una espada y un enorme planeta, empujó con fuerza las grandes puertas que en milenios habían sido abiertas y entro a lo que antes era el palacio de Cream.

No podía decir que habia destrozos por qué ese lugar estaba solo, era un santuario en la memoria de su hermana mayor, de la gran Cream Diamond, las paredes contaban la historia de como surgió de una estrella junto a su hermana White Diamond, como juntas reunieron su conocimiento y empezaron el imperio de las gemas.

— La mitad de lo mío siempre fue tuyo Cream — Murmuró melancólica White mientras miraba el mural de su hermana mayor — Me encerré tanto en mi misma que te mire como un error, a ti quien me enseñó todo, como alguien inmadura.

Cream Diamond habia sido borrada de la historia de Homeworld, dejada como una mala memoria, un cuento de terror para las gemas que siquiera pensaran en rebelarse. Después de todo fue la historia de como White Diamond destrozó otro diamante.

Pero esa historia solo la conocían pocas gemas que eran tan antiguas como el mural de la perla madre que estaba en las afueras de Homeworld. Un mal cuento que pocas veces era hablado en el palacio por miedo a molestar a White.

Suspiro y salió de ese palacio que tantos recuerdos le traía, si cerraba sus ojos aún podía ver a su hermana correr de un lado a otro con su largo cabello rizado alzado, y su maravilloso vestido corto mientras preparaba su corte.

Salió de sus memorias para salir de ese palacio ahora sí de una vez, tenía un planeta a el que ir, y unas gemas a las cuales ayudar a salir de su trauma que ella junto a las demás durante tantos milenios causaron.

Las puertas de aquel palacio abandonado volvieron a cerrarse, dejando en la casi oscuridad aquel lugar que hace milenios parecía brillar gracias a su antigua dueña. Pero White jamas vio más allá de lo que su hermana alguna vez le mostró por lo tanto no conocía aquel pasillo.

Aquel pasillo que estaba oculto detrás de su mural que daba a cuarto que parecía de observación, con una vieja teletransportadora en el centro de esta, la cual tenía solo una dirrección y ese era.