Utopía Dreams

Nocturne NO.20

El "Lulú" estaba abarrotado de personas esa noche, al parecer tenían un evento especial habían muchas parejas ocupando los espacios del lugar, la juventud se notada a flor de piel el amor se adueñó del sitio, Con un ambiente más que gratificante se anunciaba en los flyers que esa misma noche estaría tocando uno de los artistas criollos de nombre; Pororó y la banda favorita de Noemí; La Gran Mawon... parece que la sugerencia de Oscar dio justo en el clavo solo faltaba la guinda del pastel, que Joshua llegara a tiempo.

(Joshua); -Gracias al cielo que ella pudo entender el motivo de mi tardanza, pero al mismo tiempo es tan estricta, solo me otorgo 15 minutos más para que llegue.
*pensaba Joshua mientras se disponía a bajar del uber en la zona colonial.
(Joshua); -te juro que la próxima vez la invito mejor al cine, ni siquiera tengo idea de cómo es ese lugar, el tal "Lulú Tasting Bar" ¡Oscar confió en tu elección amigo!

Allá a lo lejos se podía ver a Noemí con la cara llena de enojo y tristeza, había esperado a Joshua durante casi una hora completa, esa mujer estaba radiante, hermosa, exquisita, llevaba un vestido carmesí escotado, el pelo suelto que descansaba casi en su cintura, no tenía maquillaje (tampoco es que lo necesitara) una morocha de labios carnosos, en resumen el joven Joshua es un tipo afortunado.

Él a pocos pasos de su mesa, se detuvo, quedó pasmado al ver la mujer que lo acompañaría esa noche, "valió la pena cada maldito segundo". la observó sin ella darse cuenta por unos instantes... el chico si que estaba fascinado.

(Joshua); -Hola señorita, ¿será que la puedo acompañar en su mesa?
(Noemí); -...eres un estup... ¡ven y siéntate! ¿Qué estás esperando?
*decía ella mientras soltaba una leve sonrisa.
(Joshua); -sé qué andas un poco enojada, te hice esperar por mucho tiempo... lo siento, en serio.
(Noemí); -sí, hoy demostraste que la puntualidad definitivamente no es tú fuerte pero, lo importante es que ya estás aquí... es lo que importa ¿no?
(Joshua); -amén, oye, no tenía idea de cómo iba a ser el sitio, alguien me ayudó a elegirlo ¿te está gustando este ambiente?
(Noemí); -pues parece que ese alguien me conoce mucho mejor que tú Joshua, ¡jaja! El lugar está perfecto me encanta, además, ¿pudiste ver los Flyers cuando llegaste?
*exclamaba Noemí con una cara de emoción infinita.
(Joshua); -no, no pude fijarme en eso cuando venía, mi mente ya ocupaba mucha información *jadeo*.
(Noemí); -que golpe de suerte pegaste cariño mío, hoy tocará una de mis bandas favoritas en el lugar ¡¡La Gran Mawon, que emoción!!
(Joshua); -¿bromeas? Al parecer hoy sí pegamos una, estuve bateando de foul durante todo el día, ¿que me traerá la noche?
*decia Joshua mientras le echaba una mirada con cara de total perversidad.

Noemí disfrutó de la compañía de su querido novio Joshua y además de su banda preferida, bailaron casi todas las canciones esa noche, besos no faltaban, caricias sobraban. La noche para ambos tuvo un buen giro, la cena fue un manjar y no había que preocuparse por la cuenta, la "señora tarjeta de crédito" del padre de Joshua los acompañaba... ¿qué más se podría pedir?

(Mesonero); -jóvenes aquí tienen su cuenta...
(Noemí); -bien Joshua, creo que hoy pagaré yo, me encantaría hacerlo.
(Joshua); -¡no, no, no! ¿Pagar tú? Yo te invité esta noche, soy un caballero pagaré yo, por favor permítame a mi la cuenta, mesero.
*decia Joshua de una manera exaltada.
(Noemí); -¿en serio estamos decidiendo por quien invitó a quien? Me niego, vas a tener que dejar que yo pague, además llegaste tarde a nuestra cita no tienes derecho a quejas amor mío.
(Joshua); -por Dios, eres más obstinada que yo... *jadeo*

-Noemí no me dejó pagar la cuenta, al parecer todo ese día de ajetreo y estrés fue en vano, o no, ¿a quien no le gustaría que su chica pague la cuenta? Por lo menos una vez. No, no hubo sexo, el padre de Noemí pasó a buscarla al "Lulú" a la hora exacta, no dejó que hiciéramos nuestras movidas sexuales ese día, ¿que solo pienso en el sexo? Cómo no hacerlo con semejante mujer.

Tenemos un complemento ella y yo, no ponemos el amor a la primera, hemos cambiado esa ideología tenemos presente que es mejor la compresión casi absoluta que el amor desmesurado, nos hace ver de forma clara, los pensamientos están despejados a la luz de las ideas en su estado vivo.

Hay una línea que no se puede violar, la compresión lo es todo, si pero, comprender en exceso no es saludable y poder jugar con ambas cosas sin quemarse es casi imposible, espero no ser yo el primero que tropiece durante este camino, no nos amamos eso es seguro aunque el vínculo se hace más fuerte cuando puedes entender y razonar... antes que amar y entorpecer.

Joshua terminó una velada gratificante, todo salió bien si hacemos memoria en dirección a cada percance que ocurrió antes de su cita, él quería cerrar con broche de oro pero, su suerte no daba para más, Esa noche llegó a la casa y se duchó de inmediato... una ducha tibia, no encendió la Televisión, intercambió unos cuantos mensajes de buenas noches con la hermosa morocha, se dispuso a acostarse boca arriba... pasó un largo rato.

Noches pasadas había experimentado unos pensamientos profundos, con ideas fuera de foco, sin sentido alguno, tenía dudas existenciales de un día para otro algo que a él mismo le disgustaba, pero lo que iba a ocurrir esa noche lo cambiaría todo, cambiaría su testarudez, su norte, su enfoque... cuando despertara ya no sería el mismo Joshua de siempre, sería un renacer desconcertante y con más dudas que respuestas firmes.