"Eres una bendición"

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Antes de empezar quiero pedir disculpas por mi inactividad.

En un principio, mi plan era subir este capítulo junto con más historias pero, como ya sabéis, con la pandemia y los meses en confinamiento que pasamos mi cerebro decidió que también iba ha estar en confinamiento y se ha pasado estos meses muy inactivo.

La buena noticia es que, parece que ya se va despertando, por lo que espero subir este último capitulo y así poder poner un punto y final ha esta historia.

P.D.: Al final del capítulo, publicaré los resultados de las votaciones. Asi que, preparaos porque pronto podrían venir historias nuevas.

Como siempre, quiero agradecer ha todos los que estáis leyendo mis historias. Sois maravillosos y espero que esteis lo mejor posible (teniendo en cuenta la situación que estamos viviendo) y que esteis cumpliendo con las medidas de seguridad: recordad que tanto vuestra salud como la de todos vuestros seres queridos está en juego.

P.D.2: Si alguna vez tenéis algún problema y no teneis ha nadie con quien hablar, no dudeis en poneros en contacto conmigo, a parte de escritora soy muy buena dando consejos y escuchando a la gente, y recuerda, NO ESTÁIS SOLO/AS.

Ahora si que sí....EMPEZAMOS LA HISTORIA

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Después de degustar un delicioso banquete, el cual dejó satisfecho a cada invitado, llegó la hora del brindis, donde todo aquel que lo deseara podría levantarse y hablar sobre la pareja, contando anécdotas vividas con ambos o con cada uno.

Entre las historias que se contaron hubo algunas que fueron muy cómicas (como la que contó Sasuke sobre el día en la que fue perseguido por su hermano por todo el complejo Uchiha estando ambos desnudos), hubo otras más vergonzosas, contadas por Kakashi (no dio muchos detalles pero la cara roja de vergüenza de Itachi fue suficiente para avivar la curiosidad de todos los presentes) y por Kiba, que se puso ha contar "ciertas" historias de su tiempo como el equipo 8. Otras fueron tan bochornosas que no pueden ser revelados y otras, tan emotivas (como las de Neji, Naruto y Sakura) que lograron que más de uno soltara alguna que otra lagrimilla. Pero, independientemente de como fuera la historia, todas ellas mostraban el cariño que les procesaban todos.

La última en brindar fue Hanabi, la cuál se levantó de su asiento copa en mano y dirigiéndose a la pareja exclamó:

- Hinata nee-sama - empezó - Yo nunca conocí ha nuestra madre. Nunca pude ver la sonrisa en su rostro, escuchar su melodiosa y dulce voz, oler su perfume de lilas y jazmín o sentir sus cálidos brazos abrazándome con ternura y comprensión. Nunca pude disfrutar de ella. En cambio, te tuve a ti. Eras mi referente, mi amada hermana mayor a la que tanto admiraba y amaba y a quien tanto quería parecerme. Nunca ví la sonrisa de nuestra madre, pero siempre veía la tuya cada vez que venías ha jugar conmigo a pesar del cansancio que sentías. Nunca escuché su voz, pero te oía a ti, consolándome, apoyándome y animándome día tras día logrando aligerar la pesada carga que yacía sobre mis hombros. Nunca olí su perfume, pero recuerdo tu olor cada vez que regresabas de entrenar, te duchabas o me abrazabas durante la noche cada vez que tenía una pesadilla. No sentí sus abrazos, pero tuve los tuyos. Cada día, a lo largo de mi vida, has sido tú quien ha estado cuidándome y velando por mi bien. Nunca tuve una madre, pero no la necesité porque estabas tú. Vi tu felicidad cada vez que hablabas de tu equipo, tu alegría al conocer un logro de Naruto, tus miedos y dudas cada vez que salías a una misión peligrosa, la perseverancia y fuerza que demostrabas cada vez que te levantabas tras haber fallado en un entrenamiento o en una misión, las ganas que demostrabas por hacerte más fuerte, la dulzura con la que tratabas a todo el mundo, el cariño que sentías por tu, ahora marido, la tristeza que sentiste cuando te enteraste que era un asesino y un desertor, el miedo y la desesperación que sentiste al pensar que jamás volverías ha verle, la angustia cuando creíste que sería condenado a muerte por sus crímenes y la paz y amor que te embriagaron cuándo os volvisteis a reencontrar y pudisteis confesar vuestros sentimientos. Es por eso, mi querida hermana, que hoy me siento afortunada al poder verte cumplir aquel sueño que una vez creíste imposible y poder compartir este día tan feliz para ti. Para ambos. - dijo mirando ha ambos. - Por eso, queridos amigos, os pido que levantéis vuestras copas y brindemos: En honor a mi querida hermana Hinata y a su maravilloso marido Itachi.

Nuestra boda SoñadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora