Inquebrantable

Quebrantable

Ya habían pasado tres días desde que Lincoln recibió ese videocasete, por día, recibía uno. Algo que notó, fue que en todos los videos, Ronnie Anne oponía resistencia.

-¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué no puedo dejar de hacer esto? -se preguntaba el albino, mientras se seguía masturbando viendo como aquellos viejos abusaban de su novia-. ¿Por qué soy tan débil? ¿Será porque tengo miedo? ¡¿Por qué?! -gritó.

-Ojalá Lincoln estuviera aquí... -dijo con una voz dolorosa la latina, lo decía mientras levantaba su trasero para que el gordo la penetre por ahí-.¡Ohhh!

-¡Dices eso, pero no haces nada para evitarlo! -gritó con furia, para luego acabar nuevamente. Mientras su exnovia estaba siendo sumisa por tres lados, el miró todo el desastre que hizo-. Me doy asco...

Mientras Lincoln limpiaba, una chica miraba desde su puerta, esta vez, Lincoln se había olvidado trabar la puerta, o simplemente, ya nada le importaba.

-Jeje, perfecto -sonrió aquella chica, como si hago que estuvo planeando desde hace mucho estaba teniendo fruto.

Hoy era Lunes, por lo que Lincoln tendría que ir a la escuela, así que, con casación, se levantó, limpió el desastre que hizo, para eliminar evidencia, agarró una vieja bufanda roja que tenía por ahí y limpió todo.

-... -se miró al espejo, se veía patético, desnudo y con semen goteando de su pene-. ¿En qué me convertí?

Bajó las escaleras, viendo a sus hermanas desayunando.

-Buen día Lincoln -saludó Lucy con la sartén en una mano, dentro de ella había un simple desayuno de huevos revueltos-. ¿Dormiste bien anoche? -preguntó para luego colocarlos en un plato donde se sentaba su hermano.

-Sí... -respondió cansado, no sabía que hacer con el tema de Ronnie Anne, en realidad, no sabía que hacer con su vida.

Las únicas Louds que se mantenían en casa, miraron a su hermano preocupadas.

El albino ha terminar el desayuno y ducharse, se dirigió a Vanzilla, pero no vio a su hermana deportistas por ningún lado.

-Lynn... -ella ha estado demasiada extraña últimamente, lo peor es que ha no estar ella, él tendría que llevar a las chicas, no es como si fueran unas molestia, pero hoy simplemente quiere estar solo-. ¿Y Lynn? -preguntó a Lana mientras ponía en marcha la camioneta.

-No tengo idea -respondió encogiéndose de hombros, pero luego decidió sacarse una duda que tanto ella como las demás tenía desde la mañana-: ¿Te sucede algo hermano? Te ves como si tuviera la cabeza en las nubes.

-No..., no me sucede nada..., simplemente estoy algo distraído por los trabajos de la escuela... -tal vez debería contárselo a alguien, y así ayudar a Ronnie, ¿a la policía? No..., que tal si lo detienen por encubrir evidencia, ¿a un amigo? Sí..., tal vez haga eso..., pero no a sus hermanas, son demasiadas menores para saber este tema, y Lynn ni siquiera está-. ¿Ya están todas listas? -preguntó sonriendo, y en el momento que le respondieron con afirmación, arrancó el vehículo.

Ya verá lo que hará con Ronnie Anne.

Ha enviar a cada una a sus respectiva escuela, llegó a la suya, para luego estacionar el vehículo. En el momento de entrar a su clase, notó como algunos compañeros suyos estaban levantados y charlando.