Narra Angie
Entre a ese curso lleno de chetas, parecería que tuviste algo en la cara que todos se quedaban mirándome, me siento al fondo de la clase y noto una mirada sobre mí, cuando giro la cabeza me encuentro con una chica mirándome fijamente, al observarla bien me doy cuenta que es la misma mina estúpida de está mañana, es joda que quiere?
Pero no me voy a poner a pensar en eso, empecé a prestar atención a la clase, matemáticas, que cosa más difícil, nunca le voy a poder entender, mejor me concentro y vuelvo a leer el teórico
Cuando me di cuenta la hora ya había terminado la clase y ahora tenía que ir a arte, esa era una de las materias que más me gustaban así que intenté llegar temprano
En la clase de arte
Hacia ya una hora que estaba en la clase dibujando un rostro con la técnica de puntillismo, estaba tan cansada que pensé en pedir permiso para ir al baño y de paso distraerme un rato
Angie -- Profe puedo salir al baño?
Profesora -- Si Angie, pero no tardes mucho que que solo tenemos dos horas hoy
Salí del aula y decidí ir al baño de abajo, ya que estaba más cerca y la verdad era más limpio
Entro y suena el típico ruido de esa puerta oxidada, las luces se prenden automáticamente, pero no estaba sola, había alguien era esa chica de la clase de matemáticas y si por cierto la que casi me atropella, se estaba poniendo rimel en el espejo, ése pelo que tenía largo y brillante, nunca lo había visto en otra persona, mirándola y sin darme cuenta gira su cabeza para mirarme y abre su boca rosada con unos leves brillitos que solo su prestabas mucha atención podías notarlos
Brisa -- ¿Vas a pasar o te quedas ahí parada?
Solo la rebajé y salí del baño, sin siquiera hacer nada
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