《capítulo IV》

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Por mí culpa Ray y yo debíamos permanecer en cama durante un mes. Era de esperarse, no me arrepiento de nada pero estoy seguro que esa no es una excusa argumentativa lo suficiente para perdonarme.

No me ha dicho nada, no me hablaba. Solo se la pasaba durmiendo más de 7 o 10 horas al día, se despertaba pero al cabo yo debía dormir y no podía hablar con compostura por la falta de sueño que me consumía. En cambio Ray se desvelaba y no dormía como corresponde, se acostaba a la 5 a.m.

Imperdonable

Algunos de los pequeños venían repetitivas veces para darnos los cuidados dependientes y eran esos pocos minutos en el que podía, al menos, saludarlo.

Esto ya me estaba hartando. Debía especificarse ante mí; esas cosas dejan intriga de saber si te han hecho enojar o si solo te ignoran.

Eran las 18 p.m todos se estaban divirtiendo en familia junto a la mayor azabache. Nosotros estábamos reposando en un profundo silencio, en el que no deseabas saber nada del otro mundo.

Veía a Ray acostado de su lado izquierdo, mostrándome su pequeña espalda.

-¿Ray? -era de esperarse que no respondiera.

Sabia que mamá me regañaria en un futuro por hacer tal acción, pero ya no importa.

Me levanto de mi cama y me tiro sobre él.

-Boh. -susurre en su oído y pude visualizar como sus ojos se abrieron repentinamente.

-Ngs... Norman ¿qué tratas de hacer? -sabia que no dormía.

-Vaya, vaya, pensé que dormías. De todas formas ya era hora que despertaras y cambies tu rumbo de sueño, mocoso. -musite con burla.

-Admito que no dormía esta vez. Pero quisiera saber la razón del por qué te levantas, sabes que nos indicaron distanciamiento.

-Eso es opcional, Ray. Solo estamos resfriado, hay diversos síntomas pero destacó que no es necesario el separarnos con tal de no durar mucho, estar en temperatura perfecta, aislados y en este preciso lugar, estaremos bien. -le informé con astucia.

-Gracias por el concepto innecesario. -parecia querer retrucarme.

-Me acostaré a tu lado. -me reacomodo dándome paso en su cama.

-No me quieras sacar de quicio. -bufo dándose la vuelta.

-Te veo muy discutible. Ya sabés que hacer. -le ordene por sobre su hombro.

-No abriré la maldita boca.

-Venga, por favor ¿dónde estás el descarado de Ray? -comencé hacerle cosquillas en sus axilas

-¡Ja, ja, ja! B-basta Norm- ja, ja. -queria defenderse empujando con dificultad mis hombros

-¿El directo y testarudo de Ray? -baje mi cabeza a su cuello y mis manos seguían el trabajo de pasear por las zonas sensibles a la risas.

-¡Ya déjame! ja, ja... Idiota. -me abrazó el cuello y paré. Tarde 5 segundos en darme cuenta que estaba encima suyo.

Abrazando su retaguardia y mi cabeza apoyada en su estómago. Mientras él, no podía observarlo, estaba sobre las almohadas hinchadas dándome caricias en el pelo teniendo sus piernas delgadas alrededor de mi cintura.

°•▪Tengo suerte de enamorarme de Ti▪•°◇《Norman X Ray》◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora