Pov narradorEra un día normal para aquel castaño, asta que recordó aquel día en que tras ser desterrado y separado de sus compañeros llego al bosque de las hadas y se encontró con su querida hermana muerta al igual que todo su bosque.
Tras estos pensamientos no pudo evitar sentir remordimiento hacia su antiguo compañeros inmortal Ban.
— Maldito imbesil...! — Maldijo susurrando el castaño. — Como pudiste hacerle eso al bosque de las hadas y a aquella santa?!
Al decir estas palabras y recordar todo lo que había sucedido no pudo evitar soltar varias lágrimas y empezar a llorar igual que un niño pequeño.
Despies de varios minutos desarrollando aquella acción una voz ya conocida lo interrumpió.
Era la vez del inmortal Ban....
— Oye niño....estas bien? — Al parecer su antiguo compañero no lo había reconocido.
— Tsk! No me toques imbesil! — Palabras por las cuales el menos quedó confundido.
— Niño solo intento ayudarte, así que no me faltes el respeto!
— Oh, así que no me reconoces verdad? — soltó una carcajada — Bueno ya que. — Dicho esto el peliazul pudo sentir como el tesoro sagrado del castaño ( Chastiefol ) se atravesaba en su pecho.
— Hey niño, intentar asesinar a alguien no esta bien, sabes? — Dijo con normalidad aun sin reconocer a su atacante.
— Deja de decirme niño!! — Grito el mayor.
— Lo siento pero, no se tu nombre. — Dijo él peliazul. — Me lo podrías decir?
— Tsk! Soy King Ban... — Palabras por las cuales el menor quedo perplejo. — Soy el hermano de Elaine! Aquella santa que mataste!!! ERA MI HERMANA!!!!
— Lo recuerdas Ban?! — El peliazul aun no podía creer lo que este le estaba diciendo.
— Yo no la mate.... — Susurro este, pero el castaño solo lo ignoro.
Una vez reunidos tres de los siete pecados ( Meliodas, Diane y Ban ) ya que el cuarto ( King ) abia había desaparecido por completó, una puerta hacía el mundo de los muertos fue abierta por un fuerte recuerdo.
Una vez dentro Ban se dedico a buscar a Elaine siendo seguido por el castaño, una vez que King pudo ver como el peliazul de detuvo de inmediato lo convirtió en piedra, para luego aquel echiso ser desecho por el espíritu de la rubia, Elaine.
— Elaine porque lo proteges?! — Esta no respondió.
— Elaine responde, es tu hermano. — Dijo el peliazul a lo que la rubia solo se negó.
— Entiendo.... sigues molesta porque te abandone a ti y al bosque hace 700 años, verdad? — Esta no dijo niuna palabra.
Así pasaron los minutos asta que la rubia se decidió a hablar, sin antes que el peliazul se retirara a ayudar a sus compañeros.
— Al momento en que le dijiste a Ban que eras mi hemano, el dejo de poner resistencia a tus ataques. — Palabras que al mayor lo sorprendieron. — El no me asesino, el me salvo.
— Elaine.... — Al castaño no se le ocurrían las palabras.
— Solo te voy a pedir que protejas a Ban. — El mayor solo desvío la mirada. — Por favor King.
— Esta bien Elaine, lo protegeré hasta que podamos encontrar una manera de devolverte a la vida! — La menor no dijo palabra alguna.
— King yo.... — El ambiente se torno incomodo. — No quiero que me resisten por favor, te pido que no me cuestiones y que le digas a Ban, aseguraré de que el pueda seguir con su vida.
— Elaine... — Este no pudo evitar llorar tras las palabras de su hermana. — Por favor no.....
— Lo siento hermano.... — La menor solo abrazo a su hermano y comenzó a llorar junto a el.
— Deverias hablar con Ban.... — Dijo el castaño. — Es mejor que lo escuche de ti...
Al cabo de un rato los dos hermanos pudieron ver como el peliazul se acercaba, el silencio se iso eterno hasta que la rubia se decidió a romperlo contandole su desicion al inmortal.
— Elaine pero que mierda estas diciendo?! — Grito sollozando el peliazul.
— Lo siento Ban, pero esa es mi decisión. — Dijo firme la rubia. — Quiero que seas feliz por favor....
Esas fueron las ultimas palabras de esta para luego desvanecerse en pequeñas y cálidas luces, luego de esa despedida ambos chicos se dirigieron donde el resto de sus amigos estaban.
— Hey Ban! — Llamó Meliodas.
— Capi! Me encontré al hermano de Elaine. — Señalo el peliazul.
— Oh, hola King! — Saludo Diane.
— Que te pasa Diane? Porque le dices King al niño? — Preguntó Ban.
— Ban no te as dado cuenta de que ese es King? — Dijo el rubio.
— Que ese niñito es King?! — Grito mientras señalaba al castaño.
— Pues si wey, no manches. — Dijo el rubio al inmortal.
— Bueno vamos! No se queden ahy parados! — Grito aquel cerdo que los acompañaba.
— El tocino tiene razón. — Apollo la gigante.
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Continuara.....