Entrenamiento

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Kyle: Me han hablado mucho de tí, Diego
Yo: ¿Cómo sabes mi nombre?
Kyle: Ya te lo he dicho, me han hablado mucho de tí
Yo: Si es una broma no me hace ni puta gracia
Kyle: No lo es - dijo de manera sombría - Solo quiero agradecerte
Yo: ¿Agradecerme?
Kyle: Sí, por acabar con un poco de los inútiles del Team Rocket
Yo: ¿Quién eres en realidad?
Kyle: Mi nombre es Kyle Sutterland, y soy del K-1
Claudia: ¿K-1?
Kyle: Ya los descubrirán. La próxima vez no te irás sin combatir conmigo Diego. Malamar, llévame a la base
Yo: Espera

Me abalancé sobre él pero no pude alcanzarlo, ya se había ido

Claudia: ¿Qué será ese K-1?
Yo: Ni idea pero ahora no tenemos tiempo para eso, debemos seguir, además, como dijo él, ya lo descubriremos
Claudia: Sí, supongo
Yo: Arceus, por qué me haces estás cosas

Esto me hizo pensar que deberé entrenar yo también, no solo a mis pokémons, no sé por qué pero tengo un mal presentimiento así que lo mejor será estar preparado físicamente. Luego de eso devolvimos a los pokémons a sus respectivos lugares y seguimos caminando hasta que llegamos a Ciudad Deneb. Luego de curar a nuestros pokémons le dije a Claudia que explorará la ciudad o qué hiciera llegar que quisiera, que yo tenía algo que hacer. Me fui a la Cueva Helada con intenciones de entrenar

Yo: He leído que bajo tierra hay más presión de aire y por consiguiente es más difícil entrenar, así que vamos a ir al último piso de esta cueva. Cómo se bajara a los pisos de abajo, porque no creo que sea como el juego, que haya un hueco y ya, me pueda tirar ahí y listo.
Lucario: ¿Y cómo bajaremos?
Yo: Ni idea

Guardé a todos en sus balls y seguí caminando por la cueva, en la que no había tanto hielo y el poco que había se podía pasar fácilmente,  lo único malo es que se podía romper y hacer que me congele en un lago a
- 300°C pero bueno, no pasó eso.  Luego de caminar unos 100 metros vimos un agujero de dos metros de diámetro que conducía al piso de abajo y ahí saqué a mis pokémons

Yo: ¿Saltamos a qué?
Pikachu: Estás loco, son tres metros y quizás más, te vas a matar
Yo: Querrás decir nos vamos a matar
Pikachu: Estos no sé pero yo estaré en mi ball tranquilamente
Yo: La decepción la traición hermano
Pikachu: ¿Qué?
Yo: Nada nada, venga va, solo son tres metros
Lucario: Créeme, no vas a sobrevivir si saltas por ahí
Yo: ¿Entoces qué hacemos?
Pupitar: Tengo una idea, ¿Tienes una cuerda?
Yo: Sí - dije sacándola de la mochila
Pupitar: Perfecto, yo me quedo aquí arriba sujetando la cuerda y tú bajas con todos los demás en sus balls
Yo: ¿Crees que puedes aguantar?
Pupitar: ¿Quieres intentar cargarme?
Yo: Vale, muy senci - se dejó caer en mis manos - Ahh coño, pesas como 100 kilos, no quiero ver cuándo evoluciones a Tyranitar
Pupitar: Exacto, ves que sí puedo aguantar
Yo: ¿Cómo aguantarías la cuerda si no tienes brazos ni piernas?
Pupitar: Me pondré encima de ella
Yo: ¿Y cómo vas a bajar?
Pupitar: Me lanzaré y antes de que llegué al suelo me lanzarás mi ball y entraré a ella
Yo: Joder, piensa más que yo. ¿Y si fallo?
Pupitar: Sé que no lo harás, confío en tí. Espero que no falle porque lo voy a matar si lo hace
Yo: Gracias amigo. En fin, ya está decidido - dije y puse a todos en sus balls, arrojé la cuerda y Pupitar sujetó el otro extremo - Venga voy

Empecé a bajar la cuerda poco a poco

Yo: Esto me da un poco de miedo la verdad
Pupitar: ¿¡Que te da miedo!? ¡Tú querías saltar tres metros hacia abajo y esto te da miedo! ¡Créeme que es muchísimo más seguro esto que saltar
Yo: Si tú lo dices

Entre toda la charla ya había llegado al piso de abajo, fue bastante fácil y todo sucedió según el plan. Así hicimos con tres pisos más, en el juego no era tan profundo. Cuando llegamos al último piso me dispuse a explicar el plan de entrenamiento

Maestro PokémonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora