La Academia (TodoMomo)

Capítulo 3: 4°A

Todoroki entró a la clase y observó.

Era una sala amplia, completamente blanca con pupitres perfectamente colocados, una pizarra y... ¿un saco de dormir?

Daba igual, tenía que preocuparse por otro tema, donde se iba a sentar.

Él no era el tipo de persona habladora, así que descartó automáticamente cualquier pupitre en la zona central.
Luego, por compadecerse de los menos avispados, también descartó las esquinas traseras (me pregunto por qué será), y como no quería llamar mucho la atención, las dos primeras filas también quedaron descartadas.

Lo encontró, el sitio perfecto para que no le molestasen durante el año, justo delante de la esquina inferior izquierda, donde el profesor a penas lo notaría y no destacaría entre los compañeros.
Puso su material rápidamente en esa mesa, y se sentó.

Pasaban los minutos y la clase se iba llenando poco a poco.

Los sitios estaban siendo ocupados por sus compañeros y ya se iba viendo la posición de cada uno.

Delante suya iba una pelirosa... ¿con la piel rosa?
Detrás suyo se sentaba un rubio con cara de pocas neuronas y a lado suyo, nadie.

Nadie se había sentado allí, hasta pareciera que evitaban ese sitio, hasta que...

- ¡Hola! ¿Te importa si me siento aquí?

Shoto levantó la cabeza, y se encontró con la cara de una chica morena de tez pálida que le resultaba terriblemente familiar.

- No pasa nada, siéntate ahí si quieres.

- ¡Perfecto! - Respondió la chica.

Su cara le sonaba de algo, pero no sabía exactamente de qué.

- Al final nos ha tocado en la misma clase

Entonces cayó, ella era la chica del examen de prácticas, la otra alumna que no tuvo que hacerlo y se quedó a mirarlo con él.

Pero, no sabía su nombre, o al menos no se acordaba, así que pasó de iniciar una conversación y volvió a agachar la cabeza.

- A todo esto, ¿como te llamas? - Dijo la morena

- Shoto, Todoroki Shoto.

- Yo me llamo Yaoyorozu Momo.

- Bien.

Que frío, que cortante, ni su poder de hielo alcanzaba tan bajas temperaturas.
Aunque tampoco estaba por la labor de mantener una conversación, así que esa fue la mejor opción.

A penas dijo eso, el saco de dormir en la mesa del profesor se abrió, y para sorpresa de todos, salió de ahí dentro un adulto con cara de poco sueño y pelo de recién levantado.

- Muy buenas, soy vuestro nuevo tutor, Aizawa, Aizawa-sensei para vosotros.

Nadie dijo nada, todos estaban incrédulos ante lo que acababa de pasar.

Hasta Todoroki se quedó con la boca abierta.

- Va a ser un año largo - Pensó para si mismo.

No le faltaba razón.

Ya está, por fin, ya lo he hecho después de meses de aplazarlo una y otra vez, y este un poco más largo que el anterior, aunque lo mío no son las enciclopedias.
Espero que lo disfruten mucho, y seguramente, gracias a todo el tiempo libre que tengo acabe escribiendo uno o dos capítulos más está semana (quizás).
Muchas gracias y cuídense.
AMKSWriter