Stay Tonight

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Otro fin de semana en aquella pista de baile. Muchas miradas caían sobre su delgado cuerpo, el cual se movía con sensualidad y delicadeza, sin mencionar que su aroma a frutos silvestres llamaba la atención.

Su bello rostro levemente sudado poseía una gran sonrisa, mantenía sus ojos cerrados, dejándose llevar por la melodía que resonaba en el lugar, perdiendo la noción del tiempo y el espacio, simplemente disfrutando.

En cierto momento de la noche, unas manos se posaron en su cintura y su sonrisa creció, su lobo y él reconocieron el aroma a lluvia y café, y se deleitaron con este.

El alfa apegó al menor a su cuerpo, bailando junto a él por varios minutos. Sonrió cuando el omega se giró y posó sus brazos alrededor de su cuello. Ambos conectaron miradas.

-Viniste- susurró Hyunjin –Otra vez.

-¿Crees que dejaría que otro alfa baile contigo?- se acercó al cuello del alto y besó la zona.

-¿Y eso se debe a qué...?- Hwang sonrió de lado, acariciando el cabello de la nuca del mayor.

Minho ignoró la pregunta y alzó su rostro, observándolo.

Sin resistir más, atacó los labios del omega, suspirando de placer al sentir el dulzor de estos, ambos movieron sus belfos con calma y profundidad, poco después su lenguas se hicieron presentes, dándole más disfrute a ambos. Sus rostros se ladearon levemente, buscando fundirse por completo.

Cuando el aire les hizo falta, se separaron, pero sin dejar de rozar sus labios.

-Vamos a mi departamento, pequeño.

El omega no alcanzó a responder, ya que el mayor lo levantó con rapidez, haciendo que sus piernas se envolvieran en su cintura. Soltó una carcajada, mientras que el alfa salía del lugar.

-Pensé que bailaríamos un poco más.

Lee soltó una pequeña risa y le extendió un casco.

-Quiero que guardes esos movimientos de cadera para cuando estés en mi cama- le guiñó y se subió a su moto, estiró su mano -¿Vamos?

-Vamos.

Una vez Hwang se acomodó y con sus brazos rodeando al mayor, se dirigieron al departamento de este. El omega sonrió, sabiendo lo que se venía.

Ambos jóvenes se conocieron hace aproximadamente un mes, en aquel club. Y cada fin de semana se encontraban ahí, en la pista de baile, para luego terminar en el departamento del alfa.

Eran encuentros casuales y a Hyunjin no le molestaba en absoluto.

Mientras él siguiera apareciendo, todo estaría bien

Una vez llegaron, subieron al piso del mayor entre risas y coqueteos, y una vez dentro del departamento, se besaron otra vez.

Se deseaban mutuamente, por lo aprovechaban cada segundo. A pasos torpes y caricias, se adentraron al cuarto.

Las ropas fueron sacadas y cambiadas por el contacto de los labios del contrario; los jadeos, gruñidos y gemidos salían de sus bocas, siendo la música de aquel lugar, junto al choque de sus cuerpos; sus caderas se movían en sincronía, creando su propia danza; sus aromas se combinaban y endulzaban aquella habitación.

Una vez acabaron, ambos se observaron con sonrisas deslizándose por sus labios, tratando de recuperar el aire y disfrutando de la sensación de los recientes orgasmos.

-Tomaré una ducha y me iré- dijo el rubio, una vez calmado.

Besó los belfos del castaño con calma y luego se levantó, queriendo ir al baño, pero una mano en su cadera no se lo permitió.

El mayor lo atrajo hacia si y lo acomodó en su regazo, quedando frente a frente, Hyunjin no ocultó su sorpresa ante su actuar.

-¿Min-

-Quédate- susurró el alfa, besando su cuello –Quédate esta noche.

Hwang sonrió de lado y posó su frente en el hombro del castaño.

-¿Estás seguro?

Lee gruñó, haciendo reír al alto.

-Te advierto que si me quedo hoy, me quedaré todas las noches que nos encontremos- dijo con burla, pero soltó un jadeo cuando el contrario mordió, sin fuerza, su cuello.

Hwang iba a protestar pero sintió como el aroma del alfa se intensificaba, embriagándolo.

"Nos está marcando con su aroma, nos proclaman como suyos", mencionó su lobo.

-¿Eso responde tu puta pregunta?- la voz de Minho salió grave, haciendo temblar al rubio, quien luego sonrió de lado.

-Claro que sí, alfita- se enderezó y tomó del mentón al castaño, conectando sus miradas –Ahora sigamos disfrutando esta noche, la primera que me quedaré a tu lado.

-Mientras no sea la ultima- susurró el mayor.

Ambos sonrieron, sus ojos brillaban y sin resistirse, volvieron a besarse. 

Sus lobos se removían contentos, sabiendo que ese simple "quédate esta noche", ocultaba sentimientos que aún no eran del todo asumidos, pero que pronto lo sería.






Holaaaa, he aquí otra historia, esta vez es de mi shipp favorito de SKZ, así que estoy muy emocionada por este proyecto.

Quiero recordar que serán One-Shots, por lo que cada capitulo es una historia distinta, la que publiqué hoy es un poco cortita pero es para darles la bienvenida.

Espero les haya gustado.

Eso, besos 


𝑶𝒏 𝑻𝒓𝒂𝒄𝒌; 𝑯𝒚𝒖𝒏𝑯𝒐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora