•Mi Hijo, Mi Felicidad •

Capitulo 05

Ayer Eric llegó a casa junto con Mathi luego de haberle contado lo del doctor, le tocaba llevarlo al cole y buscarlo también mientras me quedaba en casa.

Se sentaron en la mesa del comedor como había dejado comida del almuerzo la pasta que me hice bueno les serví, yo me hice un pan tostado. Platicamos de su día y que tal el trabajo, como se portó mathias en el colegio cosas que hacíamos normalmente luego de que el llegara de trabajar.

- Amor- me dice erick para que le prestara atención- que tal te parece la idea de irnos unos días de viaje por unos dias?- nos hacen falta esos tipos de viajes créanme, el nunca se toma descansos y si lo quiere ahora es que debe estar totalmente cansado y agotado.

- Me encanta la idea... es más estaba apunto de comentarte lo mismo solo que bueno con tantas cosas se me paso por alto- le comento- alguna idea de a donde ir?- le pregunto de vuelta.

-Tengo dos grandes opciones- se ríe- pero la que tomará la última palabra será usted Señora Zimmerman- dicho eso levanta de su silla y camina hasta donde estaba yo sentada y se inclina como para besarme pero no lo hace, e queda allí parado provocando.

- MMM... si?- yo me le acerco aún más sin besarlo, el quiere jugar y yo estoy dispuesta a darle lo que quiere- a ver, que tienes en esa cabecita?

- Espera, Anna está en casa?- Anna es la encargado de ayudarme en la casa y con el bebé, tiene años conmigo.

- Debe estar en su habitación, hoy no la sentí en todo el dis, necesitas algo?- estaba apunto de levantarme pero Eric no me dejo, el mismo agarro a mathias y se lo llevo arriba, segundos después ya estaba de vuelta sin el en brazos.

- Ok, en que estábamos?- ok, se supone que estábamos teniendo una conversación decente.

- Que quiero saber que pasa por esa cabeza tuya- inconscientemente le acaricio el cabello y bajo hasta su nuca y deja mi mano allí, el hace lo mismo pero me acaricia la espalda de arriba abajo.

- No quisieras saber- me guiña un ojo.

De un momento a otro pasamos de estar hablando de unas vacaciones en familia a comernos a besos desenfrenadamente en la mesa del comedor.

- Ya extrañaba estos momento así contigo amor- mientras seguíamos basándonos caminamos hasta el sofá en la sala de descanso a tropezones pero llegamos hacia el sofá.

Allí Eric comenzó a quitarme poco a poco la ropa que yo traía puesta y yo empecé a quitar uno a uno de los botones de su camisa y esta quedo tirada en el suelo y me agache para terminar de quitar su pantalón de trabajo y su querido boxer.

En un movimiento rápido terminamos sentados en el sofá el abajo y yo sentadas encima de él con mis piernas los lados de las de el, empecé a moverme de adelante hacia atrás provocando una pequeña erección en el, mientras el jugaba y chupaba mis senos como el sabía que me encantaba, le hablaba ligeramente el cabello, sus manos se fueron a mi espalda y trazaron una línea recta desde mi nuca pasando por mi espalda baja, mis nalgas hasta llegar a mi húmeda y mojada vagina e introdujo uno y luego dos de sus dedos dentro y fuera de mi y yo comencé a soltar pequeños gemidos de placer, me encantaba que jugara así conmigo, luego de que el se diera cuenta que estaba totalmente lista para el, quito mi sostén y de un movimiento brusco rompió mis bragas y la lanzo en algún lugar de la sala.

Agarro su erecto pene y poco a poco lo fue introduciendo dentro de mi, empezó con movimiento suaves, pero yo le pedía más y como buen esposo obedeció a mis súplicas y comenzó a bombear dentro y fuera de mi más rápido, mientras agarraba mis senos y me besa el cuello, luego la boca y así, yo besaba también su cuello y le daba ligeras mordidas y pasaba mi lengua por toda su oreja porque sabia que eso lo ponía a mil. De estar un rato en esa pocision cambiamos, ahora yo estaba acostada en el mueble con mis piernas en sus hombros y el adelante de mi bombeando con fuerza, el estaba apunto de llegar y yo también lo sentía cerca, empecé a tocarme y nos mirábamos fijamente, mi vagina se apretaba alrededor de su pene y me estaban dando pequeños espasmo gracias al orgasmo que se nos avecinaba, luego de 1 , 2 y 3 embestidas me vine y el se vino también y se desplomó encima de mi sin salirse, nos quedamos allí acostados con nuestras respiraciones agitadas y me regaló un dulce beso en mi frente y automáticamente se me dibujó una sonrisa en mi rostro.

- Dejame decirte amor, que ha sido el mejor sexo que he tenido en días- nos reímos, me dio un pequeño beso.

Nos quedamos un rato así acostados hablando, quedamos en ir a grecia y luego a México, el sabe las ganas que tengo de conocer esos países y sus playas, cuando el sueño nos venció nos fuimos a nuestra habitación a bañarnos, pero antes de dormirnos pasamos a ver a mathias y estaba rendido le dimos un beso y jos fuimos a donde morfeo, dormimos abrazados hasta el otro día, el dia que íbamos a la consulta.