Little butterfly. [ChanBaek]

Capítulo 1.

BaekHyun entró a la habitación de aquella persona cuya vida tenía que terminar.

Es algo que no podía cambiarse ni detenerse, es parte de un ciclo; vida y muerte.

Unos nacen con la suerte de un vida larga y llena de dicha, hay quienes se casan y tienen hijos, e incluso sus propios hijos tienen hijos. Pero no todas las personas tienen esa suerte, muchas personas tienen una vida corta, ya sea dichosa o llena de dolor.

Desgraciadamente hay quienes su vida no es más que un corto período de tiempo; es por eso que a BaekHyun no le agrada la gente que nace con una larga vida y no sabe aprovecharla, ellos lo tienen todo y no sé dan cuenta y el tenerlo todo no implica riquezas, implica salud y amor. Teniendo eso es más que suficiente para vivir.

La habitación estaba pintada de blanco, con cortinas blancas, todo era muy blanco y limpio. En el centro de una mesa se encontraban  unos lindos tulipanes  y justo al lado había un joven postrado en una cama; el joven se veía pálido y estaba muy delgado. Su cabeza estaba cubierta con una linda gorra y su rostro, se veía bastante mal, con ojeras en debajo de aquellos bellos ojos que aún conservaban algo de brillo.

El chico miraba por la ventana, veía a la personas caminar y sonreír, pero él no lo hacía.

En su mirada  pudo ver el deseo, el anhelo. Probablemente anhelaba levantarse de esa cama y salir, sentir el aire fresco sobre su rostro, el calor del sol, el olor de la tierra, las flores, todo.

Probablemente sólo quería vivir un poco más.

BaekHyun avanzó hacía él y el chico lo volteó a ver y en su mirada vio tristeza.

—¿Te llamas LuHan?— preguntó BaekHyun ya sabiendo la respuesta, a lo que el  chico sólo asintió.

—Has venido por mí ¿cierto?

Esta vez fue BaekHyun quien solo asintió.

—¿Sabes? Sabía que esto pasaría, estaba listo para que esto pasara, pero no pensé que sería tan pronto— Los ojos de LuHan comenzaron a llenarse de lágrimas. — Aún no me he despedido de él. Él no está listo para dejarme ir y yo no quiero que sufra por mi culpa. Lo amo y no quiero que sufra por mi culpa.— las lágrimas comenzaron a fluir más hasta que el chico terminó en llanto.

Aún quería vivir.

—Por favor—dijo con la voz demasiada cortada debido al llanto. —dime que él va a estar bien sin mí... Por favor—lo último fue más una súplica.

—Lo estará. Tal vez no ahora, pero lo estará.—afirmó. —Ahora necesito que tú lo dejes ir. Será difícil para él, pero lo superará.

—No estoy listo, no me he despedido de él. Quería verlo por última vez.

—Lamento que no puedas hacerlo, pero si te parece bien, cuando llegue su momento puedo darle un mensaje de tu parte. Si eso te hace sentir mejor.

—Por favor dile que dejarlo fue probablemente lo más doloroso de mi enfermedad, que lo amé tanto como pude, que lo amaré por siempre y que espero no haya sufrido tanto por mi culpa, que espero que se haya podido enamorar nuevamente.— una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro mientras su llanto comenzaba a detenerse.