Es el amor que pasa

C A P Ì T U L O II

"Eres mi secreto más evidente"

IVANNA FERRER

Nuevo día, nueva oportunidad de ver a la mujer que ha robado uno a uno mis pensamientos. Me despierto temprano, tomo una ducha relajante y me aseo debidamente, me visto con el conjunto que he preparado la noche anterior; desayuno y salgo de casa hacia el trabajo. Llego a la universidad, bajo del auto y me dirijo a dirección con maletín en mano. En el camino trato de visualizarla pero no la encuentro, al casi darme por vencida creyendo que la vería hasta nuestra clase, me encuentro con sus hermosos ojos, me está mirando; mantiene una conversación con sus compañeras, pero sé que no está prestando atención a lo que le dicen. Le sonrió tiernamente y entro al lugar. Firmo de llegada y salgo para comenzar con la primera clase que debo dar; volteo al mismo lugar donde la vi minutos atrás pero ya no está, debió entrar a clase.

Sí supieras todo lo que pasa por mi mente mientras me pierdo en tu mirada.

XXX

Para imaginarme un ángel del cielo, solo debo contemplarla. Yo por ella supe que el amor es más bonito que eso que dicen los libros, y que el mismo corazón puede tocarte un buen rock & roll mientras late fuerte y acelerado por alguien. He querido confesarle que me ha impactado su belleza, pero que realmente me enamore de su forma de ser. Irradia el encanto al caminar, su voz es como el canto de los pájaros, es la mujer perfecta, como una bella mariposa que acaba de extender sus alas. Los días son más bellos si estoy cerca de ella; lo que más me fascino fue esa tierna mirada en su rostro; jamás olvidaré la primera vez que la vi, me dejó encantada con su hermosura; y a partir de ese momento solo tengo ojos para ella.

Me siento feliz porque aunque sé que esto está mal y no debí permitirlo, agradezco a dios por dejar que se cruzara en mi camino una mujer tan linda, con una increíble personalidad. Y es que sí, me tuve que fijar en quien no imaginaba, de quien no esperaba y que realmente no estaba buscando. Desde ese momento aprendí que el amor no se elige. Es él quien nos elige a nosotros.

Tengo que ser honesta conmigo misma. Pienso mucho en ella. Todo el tiempo actualmente. En la mañana, en la noche, en la mitad de mi día. Es ella. Siempre es ella. Supe con exactitud qué era lo que me estaba pasando porque no dejaba de pensarla y buscarla con la mirada. Me encantaría dormir con ella. Y no, no para tener sexo...(bueno; si, también) pero hablo de recostarme simplemente en su pecho mientras acaricia mí cabello y besa mi frente; si, a eso me refiero.

Escucharla y verla reír hace mi día más lindo. Al comienzo de todo esto me molestaba porque el corazón tiene esa maldita maña de seguir deseando lo que está prohibido; pero después simplemente tuve que dejarlo pasar y aprender a vivir con este sentimiento. Llevo tiempo deseando estar con ella no solo en sus buenos momentos, sino también en los malos, donde tenga ganas de llorar, donde sienta que no puede más, porque de eso se trata.

Antes de conocerla yo no sabía lo que era mirar o pensar en alguien y sonreír de la nada, pero con un hermoso motivo. Sí me preguntaran que es lo que ella significa para mí, supongo que el brillo en mis ojos debería tener todas las respuestas.

En el pasado creí haberme enamorado, pero que equivocada estaba; solo fuè cuestión de conocerla, admirar su sonrisa, su mirada y su personalidad y pues así no se vale; cómo no iba a enamorarme?!

En la vida, uno puede conocer bellas mujeres, pero en medio de ese inmenso jardín de flores, la más bella eres tú. Y aunque existan mil impedimentos entre nosotras, me encuentro feliz de experimentar lo que es estar enamorada de verdad.

Quiero que ella sea mi persona indicada, y no me refiero a que ella deba resolver mis problemas, ni que me sirva de muleta para cuando me sienta decaída. Tampoco me refiero a que esté siempre pensando en mí, que me extrañe o que sienta que me necesita. Sino a que esté ahí, que comparta el tiempo conmigo ya que yo le compartiría el mío también. Necesito que sepa estar sin mí, pero que prefiera estar conmigo. Que sienta y actúe pensando en un "nosotras" y no en un tu o en un yo, por separado. Necesito que ella me ame porque SÌ, y no porque YO le ame.

Deseo pertenecerle.... No; eso ya sucedió. Permítanme reformular. Deseo que me toque y me haga sonrojar, que me hable claro y se quede sí las cosas se complican. Que me dé tiempo cuando lo necesite y ella me dé el aire cuando hace mal tiempo. Que se dé cuenta que sí, soy complicada, pero no imposible.

Esto no se trata de lo que sienta o no por ella, sino de lo que no siento o experimento por absolutamente nadie más. La amo, y quisiera decirle que se me hace eterno esperar hasta el día siguiente para volver a verla; la necesito ahora. Mis manos y mi cuerpo desean tocarla. Mi boca es una tormenta de besos estancados que deseo obsequiarle.

Amo su sonrisa, su cabello, adoro el sonido de su risa; me encanta como me hace sentir sin siquiera ella proponérselo. Como sí todo fuera posible.

ALUMNA