ᴡᴇᴅᴅɪɴɢ;; [ᴛʏsʜ]

Five

M e m o r i e s
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Nunca sabemos la verdad
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No sabía dónde estaba Debby, había salido temprano y ya eran las tres de la tarde, realmente solía hacerlo mucho debido a su trabajo y a todas las citas que tenía con diferentes productoras, eso no le molestaba, lo que le molestaba en ese momento era estar solo.

Porque no podía estarlo, se sentía vacío e inevitablemente recordaba cosas que preferiría no recordar. Estaba sentado en el salón, viendo la televisión, Jim estaba dormido en el suelo, solo se escucha la voz de los presentadores de la televisión y la música que tenían de fondo, suspiro y recargo su cabeza contra el sillón, cerró sus ojos un momento.

Últimamente las cosas estaban algo extrañas a su parecer, sus dores de cabeza eran cada vez más intensos y sentía como sus músculos se encontraban rígidos, estaba completamente estresado y no sabía por qué, tal vez por la boda... pero estaba feliz por eso, ¿lo estaba?

Un respingo salió de sus labios, no sabía que estaba haciendo ni que le estaba pasando, pero estaba aterrado.

— Joshie, amor estoy aquí – abrio sus ojos rápidamente, esa no era la voz de Debby, era una voz varonil, rasposa... era Tyler.

Se levanto rápidamente del sillón, mirando a su alrededor y volteándose rápidamente para ver la puerta, no había nadie ahí. Sintió como su cabeza comenzaba a doler de nuevo, se dejó caer en el sillón, su respiración comenzaba a acelerarse de nuevo, cerró sus ojos y apretó la mandíbula, la voz de Joseph seguía en su cabeza.

— Perdón por venir tarde, pero estaba haciendo algunas cosas antes... te vez tan lindo como siempre

— Para – soltó al aire, las punzadas en su cabeza cada vez iban más en aumento, presionó con fuerza esta, escuchando un zumbido en sus oídos.

— Josh, ya quiero abrazarte otra vez, verte todos los días al despertar, mi lindo chico

— ¡Para! – volvió a gritar, ahora presionando sus oídos, abrió ligeramente sus ojos, Jim seguí en el piso, no le prestaba atención, su vista se nublaba, sentio aquel calor recorrer su mano, como si Tyler la sujetara con firmeza.

Su corazón comenzó a latir desesperado, sus facciones comenzaron a relajarse y su cabeza dio una última punzada de dolor antes de caer en el sillón, lo último que escuchó fue la voz de Tyler gritando su nombre, después lo único que vio fue total oscuridad.

¿Se estaba volviendo loco?

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— ¡Tyler! – gritaba el pelinegro, totalmente emocionado mientras miraba a su castaño sentado en el sillón, con un libro en manos.

El castaño volteó a mirarlo, con una sonrisa de oreja a oreja, dejó su libro aún lado y se levantó para tomara a su chico entre brazos, abrazándolo con una sonrisa.

— Tardaste mucho en venir – le susurro el castaño, aferrándose más a Josh – pensé que ya no vendrías

— Tenía que venir, es tu cumpleaños y no pude estar todo el día contigo – le respondió el de rizos, separándose ligeramente para dejar un beso en su mejilla, mirando directamente aquellos ojos color chocolate que lo embriagaban.

— Josh, eres muy bueno conmigo – le sonrió el castaño, acariciando sus rizados cabellos y dejando besos en sus mejillas. – mi lindo, lindo chico.

Josh no pudo evitar reír, ahora él y Tyler tenían la misma edad, veintitrés años recién cumplidos, sonrió de lado al sentir como Tyler bajaba sus besos a su cuello, suspirando al sentir su lengua.

Tyler lo tocaba con cuidado, besando con delicadeza y pasión cada parte de su cuerpo.

Su primera vez juntos había sido maravillosa, casi como si fuera un sueño.

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Tyler y Josh se encontraban tomados de la mano, caminando por un campo lleno de verde pasto y bonitas y pequeñas flores blancas.

Era su primer aniversario como novios y habían decidido tener un día de campo, solo ellos dos y mucha comida.

Dejaron una manta azul extendida en el suelo, la canasta estaba llena de Red Bull, tacos de Taco Bell y muchos dulces, Tyler había llevado su ukelele.

Los dos usaban gafas de sol y sonreían a la par, cantando canciones que los dos conocían, jugando cosas absurdas y hablando de cosas sin mucha importancia.

— Tyler, te amo – soltó Josh, mirándolo directamente, con una sonrisa sincera.

Era la primera vez que Josh le dijo "te amo" al contrario

Tyler no pudo contener la emoción, dejó su ukelele de lado y se tiró hacia Josh, abrazándolo por la cintura y dejando que los dos callaran sobre aquella manta azul, beso sus labios y acarició sus mejillas, los corazones de ambos latían fuerte y sus sonrisas no desaparecían.

Tomaron muchas fotos; fotos del paisaje, de las flores, de sus comidas, de sus manos entrelazadas, de ellos dos dándose pequeños besos en los labios y en las mejillas, de Tyler tocando el ukelele, de Josh sonriendo.

De ahí se creó un álbum de fotografías;
"El primer año: Te amo"

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Josh y Tyler lloraban en el salón, abrazados con fuerza y soltando lastimeros sollozos, Josh temblaba contra el cuerpo de Tyler y este por más que trataba de mantenerse firme no podía hacerlo, estaba lastimando a Josh y se estaba lastimando a él mismo.

— ¿P-Porque, Tyler? – sollozaba conta su pecho, aferrándose de forma desesperada a su camisa, sin querer soltarlo.

— Son así Josh, ellos... e-ellos no lo entienden – se lamentó el castaño, apretando sus ojos al sentir como las lágrimas de Josh se quedaban en su camisa.

Tyler había salido del closet frente a su familia hace unos días y no lo habían tomado nada bien. No querían ver a Tyler amenos de que este se "curara" y regresara con una esposa.

Era la primera vez que el corazón de Tyler y de Josh colapsaba.

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Abrió sus ojos lentamente, su alrededor era borroso y no sabía dónde estaba, su cabeza y su pecho dolían como el infierno, habían personas a su lado, tenían batas blancas y lo miraban con atención, poniendo algunas cosas en su pecho y revisando sus pupilas. Tenía algo en la nariz que le daba oxígeno. Los sonidos eran distorsionados, no estaba entendido nada.

Volvió a cerrar los ojos y vio la profunda oscuridad de la noche asechando en sus sueños.

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oh dude, si llore.
El próximo capítulo es el final. Lov u