Capítulo 7

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Inmerso en su tarea, Marc no escuchó como su celular vibraba por nuevos mensajes, o, si se percató, no le dio la debida importancia y continuó con lo suyo; quién si no hizo fue su madre, que le dirigió una mirada y aclaró la garganta

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Inmerso en su tarea, Marc no escuchó como su celular vibraba por nuevos mensajes, o, si se percató, no le dio la debida importancia y continuó con lo suyo; quién si no hizo fue su madre, que le dirigió una mirada y aclaró la garganta. Su lectura fue interrumpida con ese odioso sonido. Al no tener reacción alguna, la madre dejó el libro que momentos atrás leía plácidamente y me aproximó a su hijo, interesada en saber qué era eso que captaba tanto su atención. Le sorprendía que la tarea de matemáticas lo entretuviera lo suficientemente para no agarrar su celular, tanto que no la sintió colocarse a su lado, como tampoco apreciar su expresión bien marcada en su rostro al verse engañada.

—¡Marc Anciel!

El pelinegro saltó de su lugar junto a su libreta y la silla que terminaron en el suelo. El cuaderno se abrió en la mitad, la frase "Capítulo 10: Ladybug besa a Chat Noir" estaba resaltado con varias líneas. Marc, con su cara roja de vergüenza, se apresuró a agarrar su libreta y ocultarla dentro de su chaqueta.

—¿Ya terminaste tu tarea? —preguntó su madre levantando una ceja.

Una mueca fue su respuesta. Ella soltó aire y se sentó en el sillón junto a su hijo.

—Si no terminaste tu tarea, ¿por qué te distraes haciendo otras cosas?

—Tuve inspiración —se limitó.

—Soy feliz con eso, cariño —Le sonrió y acomodó sus cabellos rebeldes—, pero no olvides que estás castigado y eso significa nada de distracciones.

—¿Me prohibirás escribir? —se apartó para mirarla.

—No podría, no atentaría contra tus sueños. Hablo de tu celular ―señaló con su dedo el aparato. Al instante se escuchó el sonido de una nueva notificación, Marc se apresuró a tomarlo mientras le hacía un ademán a su madre para que se lo permitiera, ella rodó sus rojos y regresó a su sillón a leer. Marc sonrió al encontrarse con varios mensajes de su amigo Nathaniel.

Nathaniel: En línea

Marc

Amigo

¿Estás ahí?

¿Sigues vivo?

Mis padres me dieron la regañada del siglo

Estoy castigado por un año, al parecer

De la casa a la escuela, no habrá más salidas.

¿Qué tenía Nathaniel con enviar los mensajes separados? ¿No era más fácil escribir de una sola vez el mensaje?

Pero yo no les creo.

De todas formas, eso no arruinará nuestros planes, querido escritor.

Hoy tuve grandes ideas, no vas a creerlo.

Mi héroe (NathanielxMarc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora