chapter two: angels fall too

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Para cuando Louis tiene que volver, no quiere soltarlo, el presentimiento vibrando en sus dedos de que algo va a suceder, no quiere esa sensación, no puede evitarlo.

Como tampoco puede evitar lo que sucede tres días después.

Y bueno, nadie se esperó esto, no cuando la música suena tan alta, con los cuerpos moviéndose, no ha sabido nada de Louis desde el martes, sus dedos vibran en necesidad, de nuevo, la ansiedad amenaza con golpearlo y esta vez noquearlo.

Es su cumpleaños, debería estar celebrando, pero en medio de su embriaguez no puede evitar girar en torno al mismo pensamiento, una y otra vez, a punto de hacerle un hoyo en la cabeza.

Sus amigos buscan sacarlo de ese mensaje, ese maldito mensaje, tan simple, tan poco cariñoso, y bueno, no era la gran cosa, solo se habían acostado, solo se había obsesionado con verlo sonreír de verdad, no esa mierda fingida de siempre, y entonces.

Bueno, entonces el mocoso decidió decirle que no estaba preparado para todo lo que estaba sucediendo.

A la mierda con esto, va a terminarse la botella.

Para cuando es media noche, y Liam decide hacerse de DJ, solo hay música en el aire, todo gira, pero no lo suficiente, golpear las paredes no le ayuda a deshacerse de ese peso en su pecho, no disminuye su rabia, ese acido que recorre su cuerpo, buscando un culpable con quien saciar su ira.

Niall empuja a todos los presentes hasta llegar a él, baja a Liam del brazo, parando todo de golpe, muchos de sus amigos estaban durmiendo en el suelo, las escaleras, espera que no esté muerto nadie.

La expresión del rubio es fría, dolida, si no lo conociera tan bien, creería que está a punto de matar a alguien, y tal vez así es. Y lo entiende, lo hace, de verdad.

Cuando lo ve allí.

En la puerta, está la persona que estuvo en su mente estos días, no todas con buenos pensamientos, algunos estaban muy, realmente muy furiosos. Pero estaba allí, con su suéter grande color rosa, su cabello desordenado, sus ojos preciosos, sonriendo. Y eso estaría bien, si no fuera por el hecho de que tiene sangre por todas partes, su boca, su nariz, su pantalón, y un corte con algunas gotas resbalando por su cuello.

Harry sabe lo que viene, tendrá un ataque de ira, perderá la maldita cabeza en ese instante, respira, a punto de decir algo, todo muere en su garganta, cuando Louis empieza a desvanecerse, y cae en los brazos de Liam.





Lo siguiente es borroso, tal vez estaba en modo automático o algo, tomo a Louis en sus brazos, lo cargo dentro de la casa, pateo a todo aquel que le estorbara a través de las escaleras, pateo la puerta de su habitación, Niall fue quien se encargó de poner en la cama al ojiazul, porque sus manos estaban temblando, Liam busco en su baño, todo tipo de cosas que fueran a necesitar.

La música zumbaba en sus oídos, y se hartó, bajo las escaleras de nuevo, lanzo el equipo de sonido al suelo, y solo grito una vez: Largo de aquí, para que todos supieran que hablaba en serio.

Su vista estaba nublada, un dolor en su cabeza se hacía más grande, quería rendirse y llorar, esconder su cabeza entre sus piernas, dejar que todo lo abrumara, estaba a punto...

-Harry, sube aquí de una maldita vez, tienes que ver esto.

Y está bien, porque cuando abrió la puerta de nuevo, solo fue para caer al suelo de rodillas.

Defenceless (O.S) LarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora