SI DECIDES VOLVER

CAPÍTULO 5. ATANDO CABOS.

Natalia se levantó con tiempo para preparar el desayuno a Alba y llevarla al colegio en su primer día. Estaba nerviosa y tenía miedo. Miedo a que no encaje, a que no quiera ir y la monté un numerito en la puerta del colegio

- Mi amor, ¿estás nerviosa por tu primer día de cole? -Preguntó Natalia mientras la daba de desayunar

- No quedo ir mami, yo aquí contigo -Dijo la pequeña poniendo un puchero y a su madre se la derritió el alma

- Ya tata, pero tienes que ir. Allí vas a hacer muchos amigos y vas a aprender muchas cosas. Y a mí luego me lo vas a contar todo todito ¿a que si?

- ¡Chi! ¡Y luego vamos con el tío Santi!

- Bueno ya veremos, que el tío tiene que trabajar, pero esta noche cenamos con él ¿vale?

- Vale

- Venga a vestirse que hay que ir al cole -Levantó a la niña de la silla y después de vestirla y peinarla iniciar el camino hacia el colegio que quedaba a 5 minutos de su casa

La cosa fue mejor de lo que esperaba, entró animada con los que serían sus compañeros y salió con la misma sonrisa pero esta vez corriendo hacia su madre

- Mami, mami, mami -Gritó efusiva la pequeña lanzándose a los brazos de su madre, quien la cogió en el aire

- ¿Qué contenta estás no? -Dijo con orugullo Natalia, comiéndosela a besos

- Mami adivina quien es mi plofe

- Mmm... No sé, ¿quién es?

- ¡La de la foto de la mesilla mami! Y es supel maja, nos ha dado una piduleta a todos, y ¿sabes que se llama como yo? ¡Es super chachi mami!

La de la mesilla.

Levantó su mirada hacia la puerta por donde había salido y la vió hablando con una madre y su hijo. ¿Podía tener más y menos suerte? "Menuda puta casualidad", pensó Natalia

Alba se bajó de sus brazos y cogió a su madre de la mano dirigiéndola a duras penas donde su nueva profesora, en ese momento Natalia solo pensaba "tierra trágame"

- Mira plofe, mi mami -Presentó la pequeña a su madre con emoción

- Em, hola -Respondió nerviosa Alba

- Perdón, no queríamos molestarte, ha sido la niña que quería que te conociera -Se atrevió a decir Natalia. Ilusa la niña...

- No te preocupes, mejor porque así te doy esto -Respondió con total naturalidad Alba, la dió un papel- Ahí vienen los materiales que hacen falta para el curso, el importe que hay que pagar para los que proporciona el centro y bueno, como funciona todo esto ya sabes, horarios, opciones a actividades extraescolares, comedor, madrugadores... Si necesitas algo abajo sale el número de teléfono al que puedes llamar, y si no, nuestra aula es la 2, los lunes y miércoles estoy hasta las cinco, y creo que nada más. De todas formas mañana hay una reunión de inicio de curso a las seis, si no puedes venir no pasa nada. Te lo lees y si tienes alguna duda llamas al número u otro día me comentas

- Perfecto, muchas gracias -Agradeció sorprendida por la naturalidad y la soltura con la que hablaba

- Y a ti pequeñaja, te veo mañana, verás que bien lo vamos a pasar. ¿Tienes ganas? -Preguntó con la más grande de las dulzuras poniéndose de cunclillas frente a ella

- ¡Chi!

- Pues mañana nos vemos entonces

- Gracias por todo Alba, hasta mañana

- Adiós chicas

Alba entró se dirigió a su despacho y allí se encontró a Julia, a la que era incapaz que ocultar sus sentimientos. Pues para ser sinceros, a Alba le estaba viniendo en grande toda esta situación.