Capítulo XXI: ¡Vaya día!

519 29 3
                                    

Tenía razón Tristan ese día cogería con mucha alegría la cama, de lo cansada que estaría.

Haya las doce de la mañana salimos y nos fuimos a hacer la guía turística por Londres, vimos el Big Ben, la Catedral de San Pablo, y muchísimos monumentos más.

El último que visistamos fue el London Eye, los chicos me hicieron una emboscada, y es que todos pagamos para subir, pero lo que no m dijeron es que yo me iba a subir a solas con Brad mientras ellos, estarían en otra de las cápsulas, así que ya nos ves a mi y a Brad los dos solos, claro que estábamos bien pero desde lo que había pasado esta mañana no habíamos hablado a solas y como comprendereís ahora se hacía difícil, pero el me saco tema con facilidad.

-Recuerda me luego que les gastemos una broma, como ellos nos hacen siempre a nosotros -dijo-

-Si, pero la verdad siempre nos hacen un favor. -dije rompiendo el hielo y abrazándome a él.

Seguidamente el me besó en la frente y me dijo mirando a las vistas:

-¿Te gusta estar aquí?

-Si la verdad que es un sitio donde me acostumbraría rápido a vivir, desde pequeña he querido viajar a Inglaterra, y ahora que ya estoy aquí, entiendo el por que de desearlo tanto. -confesé-

-Me gustaría tanto que te vinieses a vivir aquí, te tendría tan cerca.... -dijo lamentándose-

-La verdad es que yo siempre he pensado en venir a vivir aquí cuando sea mayor, ahora no puedo me gustaría hacer Bachillerato, y la verdad lo prefiero hacer en España.

-Bueno serán dos o tres años así pero luego tu y yo podremos ir a vivir a algún sitio -dijo muy convencido-

Tanto me quedé asombrada que añadió:

-Si tu también crees que puede pasar claro.

-No se si va a pasar eso, pero desde luego no te voy a dejar ir tan fácilmente.

-Pero si antes no querías nada conmigo decías que era imposible. -dijo con recelo-

-Ya , ya lo se porque no te tenía, pero ahora que te tengo no podría dejarte escapar. -dije roja al darme cuenta de lo que acababa de decir-

-No tienes porque sonrojarte -dijo-, me gusta cuándo me cuentas lo que sientes por mí.

-Yo nunca había sido tan cerrada, pero es que tengo miedo nunca me había gustado nadie como lonjas hecho tu.

Habíamos llegado al punto más alto de la noria, la vista era espectacular, me dirigí a verlos desde un extremo de la cápsula, tocando con las manos el cristal, en nada noté a Brad rodeándome la cintura con las manos, yo me giré le miré, él me miró y me dijo:

-Ahora lo tengo claro, Sara se que no llevamos mucho juntos, pero también se que no he necesitado a nadie en la vida tanto como a ti y he llegado a la conclusión de que...... -se paro un breve instante pero continuó-

-De que te...... quiero...., ¡te quiero! -repitió- Y lo hago desde que el motivo de mi sonrisa eres tu.

Era lo más bonito que me habían dicho nunca lo abracé con mucha fuerza, puse mi cara pegada a la suya y dije:

-Yo también te quiero! -seguidamente nos besamos, no me lo podía creer Brad y yo ya nos habiamos dicho nuestro primer te quiero, en lo más alto del London Eye, me parecía tan romántico...

Cuando bajamos del London eye todo el viaje al restaurante para comer, nos lo pasamos besándonos, los otros nos llamaban los besucones, la verdad es que a mi no me importaba Bradley me cogió por la cintura y empezamos a andar el me llevaba, me encantaba pasear por las calles agarrada a él.

Una vez en el restaurante, todos pedimos de comer, en cuanto vino una buena masa de fans a que les firmaran servilletas, todas las que hablaron conmigo me preguntaron si estaba saliendo con Bradley, y yo la verdad no quería decir que si, porque las destrozaría como yo estaría si me enterase de que Bradley William Simpson, el cantante de The Vamps tiene novia, así que decía que sólo eramos amigos.

Por la tarde hicimos la visita turística a Londres pero esta vez de los centros comerciales, y me compré todo lo que me gustó la verdad es que eran enormes, y tenían de todo, los chicos se esperaron bastante rato por mí, lo cual agradecí (jajjaja)

Cuando nos fuimos de la última tienda, nos dirigimos a coger un taxi, los chicos me llevaban todo lo que me había comprado, por la única razón que cuando vino el taxi se metieron todos lo chicos, dejandonos a Brad y a mí y se largaron.

-¿Por qué han hecho eso? -dije flipando-

- Porqué aun no es nuestra hora de irnos -dijo sonriéndome.

_________________________________________________________________________________________________________

MUCHAS GRACIAS A TODOS QUE SEGUIS MI HISTORIA VOTADLA SI OS GUSTA Y

COMENTADLA PARA SABER QUE OS PARECE.

The Vamps: Romance con BradleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora