Capítulo 3: "Nadie podia Conmigo"

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-Nadie puede conmigo! -Reí de manera maliciosa y momentánea, los gritos o los sonidos de los motores hacían que mis palabras fluyeran como el viento.

Alguien toco mi hombro echándome hacia atrás y grito.

-No puedes evitarlo Joshue! perderás tu moto y el dinero que reuniste durante las carreras ganadas joder! -Dijo Lissbeth, mi prima siempre tomaba enserio mis carreras y mucho más cuando estaba en problemas o al borde de perderlo todo. Mi forma de pensar y de ser sarcástico con las cosas sobrepasaban no más de mi orgullo, porque siempre ganaba!

Nadie puede contra mí porque nadie lo entiende?

-Ya deja de burlarte Joshue, esto es serio! Vas a correr contra Matius, es un desgraciado! Además hay rumores de que es parte de la Pasma. Te puede Joder!

-Ya relájate, yo nunca perderé, además esto de quitarle su dinero me divertirá, Vale? Dije con una sonrisa. Ella solo me miro por unos segundos con rabia y luego se apartó entre la multitud, golpeando las personas para darse paso, con su cara decepcionante, no entendí si esa iba ser la última vez que correría o si dejaría de hablarme, no lo se, era la primera vez que Lissbeth me abandonaba antes de una carrera.
La preocupación se apodero de mí, mientras más se alejaba, más preocupación sentía.

-Valeee! Poneos en vuestras posiciones! -Grito el que administraba las carreras de motos, mientras sonaba la corneta, en ese momento deje mi cara de preocupación y decidí montar en mi moto.

Mi preciada moto! Valla que sí.

En el momento de agarrar el timón, muchos recuerdos sobre mi padre y mi madre dándose a golpes vinieron a mi mente, mi cuerpo se tensó como de costumbre, mis nudillos estaban agarrando el aire necesario mientras sostenía fuertemente las manijas de la moto, era la clave de mi furia, y la misma clave de ganar, concentrándome en el objetivo, que en este caso es Matius. Parecía contento mientras me miraba, estaba seguro de lo que iba hacer, mientras hacía rugir su moto. Mi intento de intimidarlo al lanzarle una mirada asesina no funciono, mi motor rugía al igual que el suyo, mi mente ya estaba justo donde deseaba estar, pero mi confianza se perdió desde el momento en que Lissbeth se fue, nunca corría sin ella, mi prima, la cual me a hecho fácilmente la vida desde que comenzamos a ganar dinero por diversión.

Sonó la corneta dando su último aviso.

-Estáis Listooos!? -Grito por anteúltima vez

Por supuesto que lo estoy

-A correeer!!

...

-A comer!!

Que!?

-A comer COÑO!

A comer!? Pero..

-A comer Joder! Despierta de una puta vez Joshue, que el desayuno se enfría!

Malditos sueños de siempre! Nunca sueño algo diferente! MIERDA!

Desperté mirando hacia ambos lados de la habitación, dando por señal que estaba despierto de aquel sueño, o al menos para que Andrés deje de gritar y trate de darme el desayuno que de costumbre hacia cada mañana.

Estaba tan confundido, entre el pasado y la realidad de hoy, el sueño de mi última carrera siempre me acechaban, nunca fui el chico bueno que hoy actualmente conocen. Antes era lo contrario de mí, lo contrario de claridad a oscuridad, un alma perdida.

Como reconoces alguien que está perdido? Simple.

Ves su forma de hablar, su forma de mirar, donde cada herida cuenta como rasgos en su forma de tratarte, nunca das por perdida tu mente cuando tu alma ya se está encargando de eso, en ese caso yo ya no tenía preocupación por mi bien, solo trataba de divertirme haciendo cosas que nadie hace. Nunca veras a un ñoño conduciendo una moto, o saliendo con varias tipas dentro de su propio ambiente porque simplemente su ambiente no es el correcto, como haces para librarte del mal? Simple. Pierdes lo que más amas. Y esa fue la perdida de todas mis cosas.

The Joshua's RosesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora