La Nueva Vida

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“El Huerto” como hacían llamar al gran vestíbulo al que pasaron os 5 chicos, era inmesuradamente grande, el techo era tan alto al punto de no poder verse donde terminaba, lo cual hizo suponer a Fred que debían encontrarse a una considerable distancia bajo tierra. Tenía forma redonda, de modo que había diferentes niveles alrededor de las paredes que tenían muchas puertas dispuestas a los lados de los pasillos que se entrecruzaban entre sí. En el centro, se hallaba la fogata más grande que Fred hubiese visto jamás, según James, cada noche los discípulos de Fuego se reunían alrededor de ella para convivir como si fuesen una familia. En el primer piso, se encontraban las entradas hacia la cafetería, el salón de entrenamiento, el salón recreativo, la sala de estar, y otra sala cuyo propósito James no quiso mencionarles. Su dormitorio se encontraba en la séptima planta, en la puerta número 305, que estaba grabado sobre un roto tablero, su habitación era cuadrada y había 3 camas adentro, en esa habitación dormían Brice, Troy y Fred, ya que estaba estrictamente prohibido que dos personas menores de 20 años de diferente sexo compartieran una habitación. Según James, esto era para provocar “situaciones” inapropiadas, ante este comentario Troy rio por lo bajo.

El primer día, se anunció que los recién llegados se someterían a un combate para probar sus habilidades y destinar a que clase pertenecerían, “Smart” (que era el más bajo) “Beats” (que era el nivel intermedio) e “Intel” (que era el grupo más avanzado)

Esa mañana, Fred estaba desayunando con sus amigos, cuando de repente una chica se sentó con ellos, era una chica muy guapa y de buena figura, tenía el cabello muy claro parecido al de Brice, que le llegaba hasta la espalda formando curvas, iba vestida con un jeans y una camiseta sin mangas negra, sus ojos eran color café.

Cuando de sentó, todas las pláticas de su mesa cesaron al instante. Ante esta reacción, la chica recién llegada miro incrédula a todos.

-¿Qué les pasa?-dijo con una sonrisa- No los voy a comer ni nada por el estilo.

Fred y los demás rieron y decidieron que era mejor presentarse.

-Mucho gusto-dijo la chica- yo me llamo Britanny, Britanny Core, tengo 13 años.

Fred respondió con un “igualmente” y Britanny lo examino, de la misma manera que lo había hecho James, solo que, por alguna razón, a diferencia de lo que le había pasado con James, esta acción no lo incomodaba, sino le daba curiosidad.

-Como sea-dijo Britanny apartando la mirada de Fred y volviéndose hacia los demás- ¿Listos para el combate?

-Ña-dijo Brice

-Me caes bien- dijo Britanny con una risa- Al menos eres honesto.

-¿En qué consiste el combate?-pregunto Fred.

-Verán- comenzó Britanny- tendrán que hacer 3 combates hoy contra cualquiera de los nuevos discípulos, se les dará un traje especial para que los golpes que se les den no tengan ninguna consecuencia, solo contaran como un punto, el objetivo es dar 2 veces al contrincante con cada uno de los elementos, excepto Plasma, esta prohibido usar Plasma en combates, debido a que trapasa los trajes de seguridad y causaría daños irrevertibles en los contrincantes, claro que en los entrenamientos si se usa contra los muñecos.

La información fue recibida con un murmullo general de aprobación.

-Pero dejemos a un lado el combate, eso será dentro de unas horas-dijo Britanny-mejor hablemos de otra cosa.

Y así, Britanny comenzó a hablarles sobre la vida en el cuartel general de Fuego, acerca de las costumbres de los diferentes grupos, mientras más iba conociendo Fred a Britanny, más le agradaba, en ese momento el monstro que habitaba las entrañas de Fred olfateaba el aire, expectante ante la recién aparecida. Fred logro percibir que algunas veces Britanny se le quedaba observando con su barbilla apoyada contra su mano, pero cuando ella notaba que Fred la descubría, rápidamente volvía a participar en la conversación, aquellas actitudes estaban volviendo a Fred loco ya que sus sentimientos le estaban jugando malas pasadas. Por un lado, todavía no estaba seguro de lo que sentía por Evelyn y a ella la había conocido desde hacía mucho antes, pero por el otro, había que reconocer que en varios aspectos, Britanny caía mucho mejor que Evelyn, además que, muy al pesar de Fred, también había que admitir que era mucho más guapa.

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