—¿En serio tengo que usar esto? — miré a Jin, el cual asintió con su típica sonrisa de modelo, no puedo negar que es bonita.
—Claro pequeño, te hace ver muy adorable~ — suspiré y me miré en el espejo, esto me hace sentir pasivo.
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—Si tú lo dices...— en estos días estuve aprendiendo obedecerles, no es tan malo después de todo. Me dan comida, ropa, y todo lo que yo quiera solo por ser un niño obediente. Incluso ayer me regalaron un iPhone, el último que salió.
—Bueno Kookie, ¿Me ayudas a preparar el desayuno? Tienes que irte a la escuela — asentí y entonces caminamos hasta la cocina.
• • •
—Si que te convertiste en todo un pasivo Kook~ — escuché a Mingyu reír y golpeé su brazo, no me gusta sonrojarme a estás horas de la mañana, que molesto.
—Ay si, que gracioso, ¿Y tú ya conquistaste a tu preciado Woozi? — lo miré y comencé a reír cuando puso su típica y tan conocida cara de indignado, es un pésimo actor.
—No me duele, me quema, me lastima.— colocó su mano en su propio pecho y se hizo el dramático, pero luego tuvo que dejar el jueguito gracias a que llegamos a nuestra clase y el maldito profesor de hisoria es un amargado.
Y así comenzaron a pasar los minutos, esta clase es una de las más aburridas así que solo me la pasé mirando por la ventana, ¿Saben lo entretenido que puede ser mirar los autos pasar? Mucho, y aún más cuando el maldito profesor solo habla y habla sin parar.
Cuando por fin la clase terminó, todos los alumnos salieron casi corriendo, yo y Mingyu aprendimos que es mejor hacerlo después de estos salvajes, así no salimos lastimados o algo. En realidad él lo hace para acompañarme, bien podría abrirse paso entre todos estos chicos, es el más alto.
—Esta vez te toca comprar, yo ya fui ayer — lo miré con una sonrisa divertida, se lo mucho que odia ir allí porque hay muchas personas y casi toda la escuela quiere coquetearle. Eso no le molestaría si no fuera porque su corazón ya está ocupado por alguien.
—Si...está bien — le di el dinero y me quedé en la biblioteca a esperarlo, nunca me gustó estar entre tanta gente. Además aquí no hay nadie y lo mejor es que la bibliotecaria nos deja comer en este lugar, mientras no ensuciemos nada.
Luego de un rato llegó, justo a tiempo, mi estómago ya comenzaba a quejarse, pidiéndome comida. Agarre mi deliciosa medialuna con jamón y queso y comencé a comerla, nunca probé algo tan rico como esto.
—¿Y como te va con tus tutores? Parecen chicos malos, toda la escuela habla de ellos — tome un poco de su gaseosa y luego lo miré con una sonrisa en mis labios.
—Son lindos conmigo, me regalan cosas y me dan mimos, parezco un bebé — sentí mis mejillas rojas y suspiré embobado, yo no sé que me hicieron, pero ahora ya no puedo negarme a sus peticiones, además son tiernos conmigo.
—Pero bueno, mejor vamos a comer rápido porque el receso terminara pronto — ambos asentimos y seguimos con lo nuestro.
• • •
—Profe, ¿Puedo ir al baño? — hice un puchero y la miré, viéndola asentir.
—Pero regresa rápido, ¿Ok? — sonreí y me levanté, saliendo del salón rápidamente, es que mi vejiga no aguanta más.
Luego de hacer mis necesidades, fui directo a lavarme las manos, este baño es un puto asco, solo vengo cuando en verdad es una emergencia. Alguien entró pero no le tome importancia, en realidad no me interesa tener contacto con otras personas. Si, todo un asocial.
—¿Jungkook? ¿Te acuerdas de mí? — volteé y abrí mis ojos como platos al verlo...wow
