I N T R O D U C C I Ó N

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Lis, una chica con voz baja y dulce atiende a los exclusivos clientes de su trabajo.
Ella nos explica como es la vida de una mesera, donde te quedas corto con la ilusión de las propinas, cómo los meseros tienen que soportar miradas, acosos, chillidos (que te llamen como perrito), insultos, y repelada. Al final del día todos terminan con los pies latiendo del dolor, normal.

Era fin de semana, y el pueblo salía al mercado a vender su cosecha y además era centro de comercio.
Lo que significa, mucho trabajo. Donde te ganas muchos admiradores y no hay día donde no pidan tu número. Pero, siempre te queda marcada la cara de alguien, no solo por su físico, si no por cómo quiere alcanzarte a tal punto de que hasta se ah hecho amigo de tu jefe y es cliente número uno del negocio. Y aún así no me suben el sueldo.

Quien iba a pensar que accidentalmente un tetraplegico (que se entienda el humor amargo) iba a enamorar a una mesera ingenua que cae en sus encantos.
Y así camaradas, es como el dulce e ingenuo corazón de Lis termina rompiéndose en pedazos gracias a Mark.
Sin embargo Lis no deja de culparse a sí misma, ya que no fue lo suficientemente profesional para manejar sus emociones en el trabajo, lo que la llevó a su amor frustrado...
Sin embargo Mark aparte de tener inseguridades al comenzar una vida nueva inmovilizado en una silla, se da cuenta que amaba a Lis sobre ruedas. Lastimosamente muy tarde.

¿Pero qué se hace cuando el corazón reclama amor?

Lagrimas serán derramadas por el corazón roto que le dejó el joven que atrapó su mirada en un peligroso cruce inocente de palabras.



アリアナ



Amor entre ruedasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora