Detrás de puertas cerradas

2: ¿Es arte?

Sesshomaru se sentó en su escritorio y decidió que odiaba su trabajo, más de lo que lo había hecho la semana pasada y no había pensado que eso fuera posible. Era justo ahora que tenía un compañero para trabajar en una cuenta y el compañero era el mestizo más molesto que había tenido el desagrado de conocer. Naraku le había robado ese título a Inuyasha. Naraku era como un centenar de Inuyasha, pero tampoco conocía su lugar. Claro, Inuyasha actuó a lo grande, pero entendió su lugar en su familia. Naraku no entendía su lugar en su oficina y eso estaba claro desde el primer día.

El perro demonio trató de no dejar que le afectara. Solo tuvo que lidiar con Naraku por un corto tiempo, pero incluso los últimos días que había pasado con el medio demonio parecía una eternidad por encima de otra eternidad. No estaba seguro de poder sobrevivir más tiempo con el maloliente hanyou sin destrozar al tipo de cabello color ébano, a pesar de que dudaba que el hedor se le fuera de las manos después de que ella lo rompiera en pedazos.

Y para empeorar las cosas, juró que el antiguo error de un jefe suyo estaba disfrutando de su miseria. Podía ver a Totosai sonriendo a veces fuera de su oficina, como si se riera a costa del gran Sesshomaru. Era inaceptable, pero por el momento, el perro demonio solo podía sufrir a través de su destino debido a su amor por un sueldo estable, la independencia que le permitía el dinero y el hecho de que no tenía un trabajo de reemplazo alineado. Comenzaría a buscar un nuevo trabajo si formar equipo era una señal de lo que vendría.

Fácilmente podría obtener otra posición en algún lugar, estaba seguro de eso. Incluso podrían pagarle más. El problema era que ninguna otra empresa tenía el nivel de prestigio que tenía esta. Por supuesto, un contacto continuo y prolongado con Naraku haría que este último sea nulo contra el primero.

El resto de la agencia no parecía compartir el profundo odio de Sesshomaru hacia el nuevo empleado. A varios de los hombres les gustaba conversar con él, tomar una copa con él y demás. Algunas de las mujeres del lugar pensaban que Naraku incluso rivalizaba con Sesshomaru en buena apariencia. Fue un debate entre cualquiera inclinado a apreciar la belleza masculina para discutir quién era mejor, Sesshomaru o Naraku. Sesshomaru no podía creer que su nombre saliera tan tonto o alguien con la mitad de un cerebro podía creerle a Naraku a su nivel con cualquier cosa.

Naraku era un poco más querido en la oficina que Sesshomaru, principalmente porque parecía hacer un esfuerzo por llevarse bien con la gente. En realidad, no era tan difícil ser querido más que el demonio perro, aunque teniendo en cuenta el hecho de que era frío con todos en la oficina. Pero, de nuevo, Sesshomaru no tenía ninguna razón para agradar a alguien que estaba debajo de él y no estaba en su trabajo para hacer amigos. En lo que a él respectaba, no estaba vivo para hacer amigos, por lo que no perdió su tiempo en tales cosas.

Honestamente, considerando el hecho de que a la gente de su agencia le gustaba Naraku, para él, era una clara señal de que trabajaba con seres inferiores. ¿Cómo no podían oler el engaño que flotaba desde el hanyou? ¿Cómo podrían no ver la forma de mentira en su lengua o ver la desviación en su mirada? Sesshomaru consideró que lo detectó más, ya que estaba maldito por pasar más tiempo con Naraku que con otros, que solo interactuaron con él de pasada, pero no excusó a las personas que se perdieron lo que él sentía que era obvio. Un día, estaba seguro de que su fe en el hanyou los mordería como la serpiente que sabía que era Naraku.

-8-8-8-8-

Ahora, durante los pocos días que los dos hombres habían estado trabajando juntos, Sesshomaru no fue el único que desarrolló una opinión. Naraku no pensaba muy bien en Sesshomaru y vino de antes de que se conocieran. En primer lugar, le molestaba el hecho de que los clientes adinerados que había alejado tan pacientemente de su antigua empresa se atrevieron a establecer términos con él cuando descubrieron dónde se estaba mudando. Querían que Sesshomaru hiciera algunas de sus pequeñas obras de arte para su producto. Qué repugnante , en su opinión.