"puedes más de lo que imaginas. Y vales más de lo que crees"
La joven camino hasta su recamara, había pasado prácticamente toda la tarde acomodando sus últimas cosas, además de que estaba organizando su lista de el mandado que iba a comprar el día siguiente. Camila y Joel tenían casi media hora que se habían ido a sus casas. Al principio estaba dudosos de dejar a su amiga con un completo desconocido. Dejo la libreta con los apuntes y salió al balcón. Miro las calles solas y soltó un leve suspiro. Sus ojos se llenaron de lágrimas en cuanto miro su cicatriz en la rodilla. Esa cicatriz que odiaba. Limpio sus lágrimas y cerró la puerta del balcón. Se recostó en el sillón de la sala. Encendió el televisor y comenzó a ver un programa de comedia de esos que le gustaban a su primo Christopher.
El sueño se estaba apoderando de ella, hasta que los toquidos de la puerta hicieron que se levantas a abrir
—Perdon por llegar a esta hora, pero se me fue el tiempo guardado las cosas y escogiendo las que me iba a traer
—No te preocupes Richard, pásale y deja tus cosas en la habitación del fondo.— el moreno tiro de su maleta.
—Ya cenaste.— pregunto el moreno después de dejar sus cosas.—
—eh no, pero ahorita me hago algo, y tú ya cenaste?
— No, pensaba pasar por algo de comer pero no sabía que era lo que te gustaba.
El corazón de la muchacha se aceleró, después del todo se veía buen chico. Después de Joel nunca antes un chico se había preocupado por ella, sentia demasiada confianza en el y no entendí el por qué. Ahorita mismo estaría en un ataque de ansiedad nuevamente pero no. Richard le transmitía algo diferente.
—No te hubieses preocupado por mi, si gustas puedo preparar algo para los dos, después de todo de ahora en adelante seremos Roomies y lo que más quiero es que ambos nos apoyemos en todo
—De verdad Gracias, nunca me había topado con una persona tan linda como tú, me generas confianza y estoy de verdad muy agradecido
—He pasado por muchas cosas, y lo que menos quiero es hacer sentir mal a las personas, voy a tratarme como quisiera que me traten...— suspiro la chica.
— mal de amores.— pregunto — si es eso solo te digo que el no te quiso quiérete tu, pronto va a llegar alguien que se la juegue por ti y que no se va a cansar de decirte lo mucho que te quiere.
La joven sonrió y camino hasta la cocina, el jamás entendería lo que por su cabeza pasaba. Tomo las llaves y salió.
— a dónde vas?.—
— iré a comprar de cenar
— te puedo acompañar.
Lesly asintio y ambos bajaron hasta el primer piso. Apesar de no conocer tanto el vecindario. Lesly comenzó a manejar hasta algún lugar que vendiera comida. El nombre de su primo paso por su cabeza y manejo hasta la casa de el. Richard empezaban a conocer el vecindario pues varias veces había ido a casa de su mejor amigo Christopher.
—Conoces a alguien de por aquí? .—cuestiona el joven en dirección a la chica
—Si, mi primo vive por aquí y pues le pediré ayuda de encontrá algún lugar para comprar comida.
—De hecho también tengo un gran amigo que vive justamente en esa casa.
Lesly dirijo su mirada hacia aquella casa y abrió su boca formando una gran O. Estacionó el auto frente a esa casa y miro a su acompañante...— aquí vive mi primo