Tu Corazón En El Mio

Bajo la misma estrella fugaz

Cuando llegamos al descampado había una especie de colchón tirado, pero parecía estar en perfecto estado. Pensé, oh, mierda, no puede ser.

Matt:

Lo he preparado para ti. Tranquila, no vamos a hacer más de lo que tu quieras.

Yo:

Matt... que es esto?

Matt:

Mí plan era mirar la lluvia de estrellas contigo. Sí quieres.

Yo:

Claro, me encantaría.

Justo se había oscurecido y la lluvia de estrellas estaba apunto de comenzar. Me tumbaé junto a él y el dejó su brazo bajo Mi cuello. Era un gesto de querer protegerme de todo.

Pasó la primera estrella.

Matt:

Que has deseado?

Yo:

Es que había que desear algo?

Matt:

No... bueno.... no tienes porque.

Yo:

Tu que has deseado?

Matt:

Y que más quiero? Tengo lo que siempre he deseado justo a Mi lado.

Awwwwwwww....

Matt:

Mí IPhone 6s

Yo:

Ah... vale

Matt:

Es coña, eres tu. No hay nada que se te pueda comparar.

Yo:

Oh, te quiero.

Fue entonces cuando se acercó y me besó. Cogió confianza y se puso encima de mí. Siguió encima pero no avanzó más. Note que lo decía enserdijo.
No haremos más de lo que tu quieras. Se repetirá en Mi cabeza.

Estaba intentando seguir pero tenía miedo y estaba nerviosa.

Puso mis manos en su camiseta y yo la levanté como sí se pudiera morir sí no se la quitaba. Eso que hice fue señal de que quería seguir. Mí corazón latía tan fuerte que pensé que me iba a dar un infarto.

Me quito la camiseta y, para ser honesta, hacia bastante frío, pero el calor de la excitación era más fuerte.

Mis ojos se cerraban ciegos por esa excitación. Era cómo una droga. Era una especie de anestesia para Mi. Me dejaba llevar.

Estaba temblando. Hice un esfuerzo por poner mis manos en el cinturón de sus vaqueros.

Matt:

Seguro que quieres seguir?

Yo estaba nerviosa. Me subía la adrenalina y cada trocito de Mi ser quería más. Quería una noche entera de pasión.

Matt:

No te voy a obligar.

Yo:

No se, ya no puedo parar pero tampoco puedo seguir

Empecé a llorar. Que cojones me pasa?

Matt me abrazó y me secó las lágrimas.

Matt:

Lo siento. No quería hacerte daño. Sí hubiera sabido que te ibas a poner así no te abría traído. Me puso la camiseta y me acompañó hasta Mi casa.

Yo fui incapaz de articular palabra