Capítulo 4

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—¿Te encuentras bien?—preguntó Yoongi con mucha curiosidad por saber la razón de la tristeza de la chica.

—Sí.—dijo T/n secándose las lágrimas.

—No lo estás.—dijo el chico sentándose en el columpio de al lado.

—Si ya lo sabes, ¿para qué preguntas?—exclamó la chica. Yoongi solo deja salir una risita y voltea a ver al cielo ya estrellado.

T/n se quedó viendo a ese chico tan misterioso, quien solo admiraba la belleza de la noche. ¿De verdad era tan raro? Él no era raro, era solo un ser humano, un chico de preparatoria que simplemente no tenía mucha compañía.

La chica no haría caso a los chismes y a las palabras que vinieran de la boca de otros. A partir de ahora creería en las y únicamente las palabras que salieran de los labios del mismísimo chico, Min Yoongi.

—¿Qué tanto miras?—Yoongi se deshizo del silencio haciendo que T/n volteara lentamente a otro lado.

—Nada...—

—Entonces, ¿por qué llorabas?—preguntó el chico con mucha curiosidad, pero un rostro sumamente serio.

—No es nada...—la chica volteó a ver a los árboles, estos bailaban con el viento haciendo que algunas de sus verdes hojas se desprendieran a la fuerza.

—¿Es por tu padre?—dijo Yoongi viendo cómo T/n pintaba una expresión de sorpresa en su cara.

—¿Qué quieres decir con eso?—

—Bueno...—el chico metió sus manos en sus bolsillos.—escuché parte de lo que dijiste en el salón de música mientras tocabas y por lo que veo, lo extrañas...¿no?—

T/n se dio cuenta de la muy delicada y suave forma en la que Yoongi formuló esa frase. Si bien era algo triste de escuchar, la manera en la que el chico frío y misterioso pronunció sus palabras hicieron que T/n sintiera una calidez enorme.

—Sí, lo extraño...—dijo la chica tornando su expresión facial en una triste.—Y mucho...—

Yoongi se sorprendió. Vio el rostro de la chica y, aunque apenas se conocieran, no la había visto tan triste en lo que llevaba del día, ni siquiera estando en el salón de música. Yoongi decidió mantenerse en silencio y de un momento al otro volvió a escuchar esa hermosa melodía.

Esa hermosa y triste melodía.

T/n terminó de tararear y se quedó en silencio por un momento. Escuchó las cadenas del columpio de al lado moviéndose y al levantar la vista vio la mano de Yoongi. El moretón estaba mucho menos inflamado que la vez limpiando el salón de música.

—¿Ya no te duele?—le preguntó la chica a Yoongi.
—No, pero vámonos ya.—estrechó aún más la mano y sintió la suave mano de T/n colocándose lentamente sobre la suya.

La tomó y la llevó a la moto, ambos se subieron y Yoongi llevó a T/n a su casa.

—Gracias por traerme—dijo T/n algo apenada.

—Gracias tú por prestarme la moto. La verdad me salvaste la vida...— El chico suelta una pequeña risita seguida de una sonrisita traviesa formada de lado.

T/n lo miró con asombro... Su hermosa sonrisa, sus suaves palabras y su atenta actitud... ¿por qué era tan frío con los demás?

T/n perdida en sus pensamientos no se dio cuenta de que Yoongi ya se había alejado bastante y a penas alcanzó a escuchar sus últimos pasos antes de que se perdiera en la oscuridad de la noche...

Imagina con Suga; I Need U... [Suga y Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora