Imagina con Suga; I Need U... [Suga y Tú]

Capítulo 23

(Para mejor experiencia escuchar Portland, Maine de Donovan Woods).

—Mamá... es broma.. ¿No?—la chica titubeaba, sudaba y hablaba entre cortado.—¿Volveremos a t/p?

—No, tendremos que ir a otro lugar. Lo siento, hija.—

—¿Por qué justo ahorita?—T/n no sabía qué preguntar primero.—¿Qué pasó? ¿Qué pasará con la abuela? Recuerda que ella también está aquí.

—Tuve un problema en el trabajo y.. ya no trabajo allí desde hace un tiempo. No he podido encontrar otro trabajo aquí y creo que ya es necesario un cambio. La abuela vendrá conmigo después.—

La chica se levantó lentamente. —Tengo que hacer tarea.—tomó sus cosas y caminó lentamente hacia su cuarto.

Una vez allí se sentó sobre su cama y pensó. Aún seguía en shock. Seguía pensando en todo lo que tendría que hacer en otro país: aprender un nuevo idioma, entrar en otra escuela, tener que hacer amistades desde cero, dejar a sus amigos...

Lo que más le molestó fue la poca confianza de su mamá hacía ella. T/n le contó a ella incluso lo de Yoongi. Que su mamá le escondiera las cosas no era algo tan reciente, pero creyó que si se trataba de algo así no dudaría en decírselo. La chica estaba enojada, triste, confundida y nerviosa a la vez.

Se sentó sobre su escritorio y comenzó a hacer su tarea. Cuando la terminó, se fue a cambiar y salió a dar una caminata.

Fue nuevamente al parque al que iba cuando pensaba en su papá, su amado padre. Se sentó en los columpios. La melancolía y tristeza de la noticia la hacían sentir débil. No era la primera a vez que tendría que mudarse, no entendía por qué estaba tan triste.

Admiró los árboles. La chica podía identificarse con sus hojas: se aferran fuertemente a las ramas, tratando de no caer ni aunque el feroz viento tratase de llevárselas y apartarlas del resto de las hojas. Pero tarde o temprano tenían que soltarse y dejarse llevar por la brisa a algún lugar desconocido.

T/n se cubrió la cara y comenzó a llorar.

...

—¡¿QUÉ?!—Myeong-Suk y Sunhee miraban a T/n sorprendidas.

—Sí... me tendré que ir...—la chica miraba sus pies y las ganas de llorar solo aumentaban mientras sus amigas la abrazaban con todas las fuerzas del mundo.—No quiero..—suspiró T/n.

Yoongi, que estaba en una esquina, alcanzó a escuchar la mala noticia de la chica. Él también se paralizó. Tampoco quería que se fuera... La cercanía que tenía con la chica había sido bastante durante este ciclo escolar, no quería que se distanciaran...

En sus pensamientos comenzó a pensar en un plan y decidió esperar a que finalizaran las clases para juntarse con la chica.

...

—T/n..—Yoongi se acercó al pupitre de la nombrada.—¿Puedo hablar contigo un momento?

La chica asintió.—Claro, yo también quiero decirte algo.

Al salir de clases los dos se fueron al gimnasio a hablar.

—Bueno..—quiso comenzar el chico, siendo interrumpido por la desesperada voz de T/n

—¡Me voy de Corea!

No fue la primera vez que el chico escuchó esa noticia, pero le dolía tener que recordarlo.

—Lo sé..—el chico se acercó más a ella.

Los ojos de T/n insistían en llenarse de lágrimas, querían simplemente salir y caer sobre el piso.

Yoongi no supo cómo reaccionar ante ello. Solo se quedó viendo cómo los ojos de la chica dejaban que lentamente se formaran unas pequeñas cascadas que escurrían por la mejilla de la chica. Él recordó que ya la había visto así una vez, que aquella vez también estaba así de rota. Esa vez quiso hacer algo al respecto, así que se acercó más a ella y la abrazo.

La chica lloró suavemente sobre el hombro de Yoongi. Estaba muy triste, no quería irse de Corea en absoluto, quería quedarse así, con los brazos de sus amigos rodeándola y consolándola, riendo en los momentos más absurdos y haciendo bromas infantiles.

—Oye...—comenzó Yoongi.—creo que puedo ayudarte...—

T/n se limpió las lágrimas y con los ojos aún llorosos lo miró a los ojos.

—¿Cómo..?—T/n trataba de calmarse.

—Mira... es complejo y quisiera hablarlo también con tu mamá...— Yoongi no sabía qué más decirle.

T/n asintió suavemente.—Ok...—

Yoongi abrazó aún más fuerte a la chica mientras esta se iba calmando lentamente.

—Tranquila... todo estará bien..