El curso

prólogo

Un día más ha llegado a mi vida, una que en si es única y plena,aunque no debería decirlo la chica con un crush que cambia cada dos semanas por verlos aburridos, la lista de su salón; Pero la realidad es esa, y cada día me aseguro de recordarme a mi persona quién realmente soy, una mujer decidida a triunfar y no dejarme opacar por ningún hombre, ya que estos al ver a una mujer en ese estado la destruirían, yo había nacido para ser mi propia estrella y brillar ante los demás y eso es lo que justamente haría.

caminando hacia   mi salón de clase, todo me parece emocionante, mientras me reprendía por llegar tarde otra vez a mi primera clase, con una radiante sonrisa les salude y me senté en mi asiento, justamente atrás de mi mejor amigo Oto, el primero de la clase, claro sin antes pasarme por alto la burladora mirada de Saturnino, mi rival.

-¡Hola chimuela! Llegas tarde otra vez, ¿Qué te ocurrió? – dijo este mientras me daba su mano de forma educada, mientras hacia cara de mono haciéndole uh, uh.

- Me agarro la tarde de nuevo, es decir tenía algunas cosas que hacer - dije tranquilamente mientras sacaba mi cuaderno y empece a escribir lo que decía en la pizarra.

- sisisisi- dijo él en tono burlón sabiendo que era una media verdad- Mira hoy dijo el profe Wilson que había que hacer las figuras literarias, presta atención a la clase.

Como era típico el profesor empezó a hablar acerca de dicho tema hasta dejarnos ejercicios de esta, que por supuesto tuve que utilizar de inspiración a Carlos para escribir mejor, quien básicamente era mi primer amor, de tantos ligues era el único que alguna vez me importo y como ya no sentía nada por él lo utilice; Al terminar la clase me debatí seriamente si salir o quedarme tranquilamente en el salón y como era de esperarse decidí quedarme pero me dio una gran hambre y salí a por un yogurt.

- Anda a hacerme la comida a la cocina, un sandwich de preferencia- decía un enegumento llamado Saturnino, un niño que disfrutaba discutiendo conmigo y yo igual aunque no lo aparentara- ya que sabes que naciste de la costilla de un hombre, por lo tanto eres inferior.- eso me molesto, no me gusta que me subestimen.

- Ni en tus mejores sueños, ya que la mujer es la más bella creación del mundo y hacemos mejores las cosas que ustedes, que nacen de nosotras y los criamos nosotras.

- La biblia no se equivoca y lo sabes, pero si ser ignorante es lo que mejor se te da no puedo quitarte lo que mejor haces- dijo con una socarrona sonrisa que me enojo.

- Lo dice el niño que no puede superarme en notas y que se la pasa todo el día haciéndose el chistosito- le dije tranquilamente mientras los chicos llegaban a saludarme, interesados por otra de nuestras peleas y aproveche eso para añadir con una pícara sonrisa- además nosotras no necesitamos a esa pastilla de pitufo de mayores.

A lo que mis compañeros me miraron raro y gritaron con una rara voz

- ! Arrepiéntete hija del diablo¡- dijeron al unisono a lo que no pude evitar reír abiertamente pensando en lo muerto que estarían dentro de muchos años, la parte baja de su cuerpo- sos una gran pervertida.

- No lo soy, solo me gusta informarme de muchas cosas de ese tipo, son interesantes como el triangulo que cada persona posee ni que ustedes fueran inocentes díganle eso a la Khalifa que tanto visitan.- dije con una sonrisa y carcajada que se me escapo, largándome de ahí, dejándoles en que pensar mientras disfrutaba de mi curiosa mente-Nos vemos el amor de mi vida espera a ser comprado.

Cuando Saturnino riéndose como un loco perverso dijo- Tengo un montón de fotos tuyas y un paquete de Stickers que mueren a ser publicadas en nuestro grupo de grado Loquilla.- He ahí cuando uno termina por enterarse que hay muchas Raquel en tu escuela, así que corrí con todas mis fuerzas a arrebatarle el celular sin importarle su falda.