"Harry..." Dios no podía casi hablar, solo con sus besos ya me traía en las nubes. "Es que..."
"Es que, que Jess?" dijo mientras continuaba besando mi cuello.
"Es que apenas nos estamos conociendo, y..." tomó mi cara en sus manos y me miró a los ojos.
"Jess, que importa que apenas nos conocemos? Si desde el día en que te vi no te saco de mi cabeza..." tomó mis manos y las pusó a ambos lados dejandome inmovilizada mientras rozaba sus labios con los mios. " Te metiste en mi cabeza y no puedo explicar como." sus ojos, sus hermosos ojos verdes, no podía parar de mirarlos. " Di-que-si-Jess" dijo entre besos.
Este chico lleno de tatuajes y despeinado me trae loca y no puedo negarlo. Tengo que aceptarme a mi misma que me encanta y que tambien lo traigo metido en mi cabeza desde ese día. Toda su amabilidad, su clase, su preocupación por mi... el siempre me ha tratado así, tan diferente a los demás. Pero por otro lado esta lo que pasó la otra noche. Me asustó mucho su manera de manejar la situación y no quisiera volver a ver eso. No quiero que se repita algo así por que no se de que sería capaz, si me haría daño o que. Pero sus palabras disculpandose por eso se sienten muy sinceras y le creo, tengo miedo de equivocarme, pero le creo. Con este tumor en mi cabeza no puedo darme el lujo de sobre-analizar cada paso que voy a dar, por que no se si esto vaya a matarme o no. En realidad no se si hay una posibilidad de que puedan operarme y si estos son mis ultimos días, meses, años o lo que sea, quiero pasarlos junto a él. Cuando estoy con el me siento libre, feliz y protegida, y él me encanta tal y como es. Así que espero que mi respuesta sea clara.
El seguía mirando mis ojos, frente con frente, el sobre mi. No lo pensé dos veces, lo tomé por su cabello y lo besé, con uno de esos besos que dicen todo y nunca terminan. El pusó una de sus manos en mi cabello y otra en en mi cadera enterrando sus uñas. Nuestras respiraciones incrementaban con cada segundo que pasaba.
"Aah Jess"
Comencé a desabotonar su camisa negra mientras el desabotonaba mis jeans. Eramos todo manos y besos, perdidos en esa pasión que nos consumía cada vez más. Al quitar su camisa no pude evitar el poner mis manos en su perfecto pecho y tocar sus tatuajes. Dandome la vuelta me pusé sobre el quitando mi camisa y mis jeans. Estaba solo en mi ropa interior, una muy sexy que habia comprado hace poco. Comencé a desabotonar sus jeans, le quité las botas y halé sus jeans para quitarselos, ya estaban de más. Terminada mi tarea vuelvo a mi lugar, sobre él, y comienzo a besarlo tomandolo por el cabello y él repité mi misma acció.
"Oh Jess, me encanta como te comunicas." me dijo mientras me tomaba del cabello y besaba mi cuello. "Pero por esta noche yo tengo el control mi amor." y nos voltió nuevamente quedando yo bajo él. Se detuvó a observarme.
"Sabías que eres heemosa? Dios! Podría hacer esto toda mi vida..." y me besó nuevamente. Besaba mi cuello, mi pecho, entre mis senos y se detuvó. Desabrochando mi sostén dijo: " Tienes unos lindos pechos Jess... son mucho mas lindas que en mis sueños." y comenzó a besar mis senos.
"Aah!" Dios! Como hace para hacerme sentir así!? Cada vez que pasaba su lengua por mis pezones soplaba suavemente y repetía lo mismo una y otra vez. Ya me sentía fuera de este mundo.
Continuó besando mi barriga, mi ombligo, los huesos de mi pelvis y ya yo podía sentir mis piernas temblar. Subió nuevamente a besar mi boca y metió su mano ahí... abajo... dentro de mi ropa interior. Mis ojos estaban cerrados, soko podía escuchar nuestras respiraciones y sentirlo a el. "So wet for me babe." me dijo en su acento britanico que solo me exitaba más.
Se levantó y quitó su ropa interior invitando a su GRAN amigo a nuestro juego. A mi solo me quedaban mis panties y en ese momento comenzó a quitarmelos dando besos en mis piernas en el trayecto de quitarmelos. "Me encantan tus piernas Jessy..."
