psycho;;ᵀᵃᵉᵍⁱ

Único

- ¡Me tienes harto! ¡Fuera de acá! ¡No te quiero voler a ver nunca más! -

- ¡GENIAL! yo también ya quería terminar con esta mierda y dejar de verte la estúpida cara. - Dijo Yoongi y se levantó de golpe, las personas de la heladería se quedaban viendo "discretamente" la discusión de los dos chicos. Llevaban desde que habían entrado gritándose, era extraño, por que de la nada se sonreían y después comenzaban los gritos, pero ahora Yoongi había llegado a tal punto que había decidido irse.

Un largo y agotador suspiro brotó de los labios de Taehyung, mientras terminaba su malteada de fresa, realmente estaba molesto, Yoongi era un estúpido en grandes magnitudes, era un asco de ser y no entendía por qué estaba con el.

Lo amaba..

Realmente lo amaba, cuando lo conoció, sus primeras miradas, sus primeras conversaciones, su primer beso, su primer te amo, su primera discusión y sus siguientes discusiones, sus reconciliaciones.

Las gotas de lluvia comenzaron a deslizarse por la ventana del local, en las noticias había anunciado que sería un día con lluvia, pero eso no les había impedido salir.

Pagó la cuenta y salió de la heladería, la lluvia comenzaba a ser más fuerte, puesto que no tenía paraguas siguió caminando importandole poco si se mojaba y pescaba un resfriado.

Continuó su camino hasta llegar a su departamento en la zona céntrica de Seúl, llegó todo empapado por lo que se quitó la ropa y tuvo que entrar a la ducha cuanto antes, al salir secó su cuerpo y se puso ropa cómoda, se sentó en el sofá de su pequeño living.

Min YoonGi..

Conocía a ese hombre como la palma de su mano, ¿Pero por qué seguía pensando en él? Acaban de terminar, eso que ocurrió en la heladería fue sin lugar a dudas su ruptura. Sus manos estaban temblando, la noche ya había caído y las gotas de lluvia seguían cayendo por la ventana, aún estaba en el sofá, se sentía de algún modo agobiado se sentía con un bajón emocional, y era inevitable, no podía controlarlo.

- ¿Qué debería hacer contigo?.. - Murmuró a la vez que caía rendido ante el cansancio, claro, eran las tres de la mañana y seguía despierto.

~

Tres días habían transcurrido, era demasiado, Taehyung estaba deprimido, confundido y devastado, sin duda esa era la ruptura oficial, ¿El último adiós? Sus lágrimas caían con rapidez a la vez que los sollozos eran presentes.

De pronto escuchó la puerta ser tocada, rápidamente limpio su rostro y se puso de pie a abrir la puerta.

¡Hey problema!

Pensó al ver a Yoongi en su puerta, su rostro se puso confuso a la vez que lo miraba con arrogancia.

- Tae.. Yo.. Vengo a solucionar las cosas, ¿Puedo pasar? Por favor -

- Como quieras. -

Tae camino hasta el sofá nuevamente, Yoongi le siguió el paso e igual se sentó ahí.

- T-Tae.. Yo lamento lo que ocurrió el otro día, realmente no era mi intención.. -

- Ah, ¿No era tu intención? Disculpa pero, ¿Qué no era tu intención? -

- Olvidarme de la cita de.. -

- Deja de hablar por que te voy a partir la cara. -

- ¡No! Déjame hablar Kim Taehyung, sabes que el trabajo me tiene ocupado, además.. -

- El trabajo, el trabajo, todo es el trabajo, ¡¿Qué hay de mi?! -

Reprochó a la vez que fruncia su ceño, para ponerlos en contexto, Yoongi tocaba en los bares durante la noche, pagaban poco pero el siempre amo la música, y se eferraba a esta, por más que Tae le insistía que buscará algo mejor, el seguía ahí, así que al final decidió apoyarlo, pero últimamente parecía que le importaba más su trabajo que su novio con el cual llevaba cuatro años, ¡Cuatro años!