Hasta La Muerte

No deberías jugar con el demonio

EMMA:

Despues de salir del departamento en donde pasé la noche solte un largo y ruidoso suspiro.

Al parecer el tuvó que cargar conmigo y cuidarme toda la noche.

Vagos recuerdos llegan a mi como estrellas fugases.

Verguenza es como puedo describir todo lo que pasa por mi cabeza en este momento.

Flashback:

Como pongo mi brazo en la barra y apoyo mi cara ahí. Con mis mejillas ardiento y estoy completamente segura de que estan rosadas lo más probable por el alcohol.

Había un silencio incomodo el cual yo decidí romper diciendo lo que menos esperaba mientras sonreía coquetamente. O almenos hacía el intento.

- Me quieres acompañar afuera

Al parecer eso lo toma por sorpresa ya que pega un pequeño saltito

- si claro- contesta rapido, más de lo normal. Siempre se demora mucho contestando, piensa mucho las cosas.
Yo tomo su muñeca y me acerco a su oído diciendo:

- voy a ir a hacer algo espérame afuera - me alejo guiñandole un ojo y me dirijo al baño soltando una bocanada de aire junto con unas arcadas.

Al final no vomito. Pero las nauseas siguen llegando a mi cuerpo. Es asqueroso.

Me lavo la cara y cuando ya estoy calmada salgo del baño y del bar buscando a... ¿Cual era su nombre? Zairon... No... ¿Jeison?

¡Mierda! Mi cerebro no funciona bien con alcohol.

Como no lo veo por ninguna parte entro de nuevo pensando en la posibilidad de que estuviera ahí frente a mis narices y no recordara su rostro pero entonces lo reconozco hablando con el mesero.

- Pago la cuenta de la mesa del fondo - dice aquel sujeto del cual no recuerdo su nombre señalando la mesa - toma tu propina y por favor no les des más alcohol a los chicos.

Me quedo embobada escuchando su voz que no me doy cuenta que sin notar mi presencia da la vuelta dirigiendose a aquella mesa. Para ser más exactos: se dirigió a un chico moreno el cual tenía a una rubia tetona de largas piernas sentada a horcajadas en el.

- Manuel yo ya me voy ¿cómo te iras a casa?

- Jefecito ¿ Por qué te me vas tan temprano, eh? - Contesta Manuel haciendo un puchero a lo que el chico de misterioso nombre le daba una mala mirada - bueno, no te preocupes. Iré a casa de esta preciosura - y clava su cara en el cuello de la chica, me voy antes de vomitar del asco que me da ver eso.

¡Practicamente van a tener sexo en ese lugar!

El chico de misterioso nombre sale del bar y parece que estuviera buscando algo, o alguien. ¿Ese alguien sere yo?

Me quede adentro un poco lejos de la entrada mirandolo detalladamente desde atras.

No tiene musculo pero tampoco es delgado. Tiene buen cuerpo y un culo para morirse.

Inconsientemente me muerdo el labio mientras mil y un escenas pasan por mi cabeza. Y no todas son sanas.

Empieza a salir varias personas y veo que el se aleja de la entrada.

Oh no ¿Se habra ido?

Salí lo más rápido que pude y que la gente me dejo.

Mire a los lados buscandolo y no lo ví.

¡Mierda!

Por el rabillo del ojo veo que en un pequeño callejon cercano alguien me esta llamando.

¿De verdad sera a mi?

Volví a mirar a mis lados y no habian muchas personas. O almenos nadie (Excepto yo) le estaba prestando atención a aquella persona. Me señale a mi misma preguntandole con esa acción si era yo a quien llamaba y respondió afirmativamente con un movimiento de cabeza.

Mientras me voy acercando ese alguien se vuelve más nitido y logro reconocerlo entre la poca luz que da un foco.

- ¿Esperaste mucho? Lo siento tenía que hacer algo - Dije pasando una mano por su pecho, encima de la camisa.

- Tranquila no pasa nada. Hace poco llegue.

¡Mientes!

ISAAC: (Aun en el flashback)

Ella empieza a acercarse a mi de una forma que no me gusta.

Con cada paso que ella da yo retrocedo hasta que siento la pared a mi espalda. No digo nada me quedo paralizado. Ella empieza a acercarse más hasta que estamos cuerpo a cuerpo a una distancia poco prudente de la boca, puedo sentir su respiración acelerada y caliente..

Hay un calor exagerado aquí. Estoy empezando a sudar.

- ¿Qué estas asiendo, Emma?

- Solo dejate llevar- siento el aire caliente que sale de su boca cuando habla. Tiene un olor a whisky

Pone su mano en la pared cerca de mi cara. Esto me hace sentir atrapado. Cojo su muñeca para alejarla pero ella se safa rápido y coge mi mano sin entrelazarla y empieza su ataque, ella tiene largas uñas y empieza a rozarlas por mi cuello mientras me da pequeños besos por el camino que recorrió la uña.

Eso me da un escalofrío y hago un gesto de dolor a lo que Jane responde con una sonrisa de satisfacción retorcida y sexy.

Sigue su ataque por mis brazos y subo los hombros empezando a temblar.

Emma sabe lo que hace y lo que está provocando en mí. Por eso se divierte tanto.

- Ya basta, esto no me gusta - miento y digo seriamente con un tono fuerte.

- Si que te gusta y lo sabes no me has apartado asi que dejate llevar.

- A donde quieres llegar con esto

Ella se pega mas a mi me mira fijamente es increíble lo cerca que estamos. Cada vez que hablo puedo sentir el roce de sus labios con los mios. Ella voltea su cara y se mete nuevamente en mi cuello quedandose ahí. Su respiración caliente en mi cuello me acelera el corazón, las manos me sudan.

La verdad esto se siente muy bien a pesar de que quiero que pare dejo que siga sin protestar... vuelve a dejar besos cortos por todo mi cuello y empieza a subir mas y mas hasta que llega a la parte de atrás de mi oreja y pasa su lengua.

Me sorprende lo duro que se empieza a poner mi miembro, Jane se pone de puntas y se agarra de la parte de atrás de mi cuello para empezar a besarme. La agarro de las caderas y la alejo de mi.

Si, se siente bien. Pero eso no quiere decir que ella es la que tenga el control.

Ademas no puedo matarla ahora. Esta ebria y no se sentiría igual a que estuviera en todos sus sentidos.

Ella me mira desconsertada, así que me acerco a su oido y le susurro:

No deberias jugar con el demonio.

-----------------------------------------------------

Hola!

Les agradezco a todos los que estan leyendo mi historia, esta es la primera que escribo y a mi parecer esta muy bien.

¿ustedes que creen?

Con gusto, recibire todas sus criticas constructivas y tratare de mejorar poco a poco.