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—¿Cómo que Jos tuvo un accidente.— Ashley retrocedió un tanto asustada

—Vamos, nos necesitan. Daniel ¿Te molestaría manejar?, No estoy en condiciones de hacerlo.— tomo su suéter del perchero

—Claro, dame las llaves, ve con Ashley, también está mal.— hablo el chico tomando las llaves de la camioneta

En el trayecto, aviso a Fernanda, la hermana de Jos y a la mamá de este, sin poder evitar derramar algunas lágrimas, ¿Por qué Jos?, Ya había sufrido lo suficiente esos últimos días.

Al llegar, a paso apresurado entro a la recepción, seguido por Ashley y Daniel.

—Buena noche joven, ¿En qué puedo ayudarle?.— pregunto amablemente la recepcionista

—Disculpe, necesito información del paciente José Miguel Canela Rivera, por favor, fue ingresado esta tarde debido a un accidente.— habló tan rápido que temió que la recepcionista no lo hubiese entendido

—No me han dado su diagnóstico, pero aquí viene el doctor, el puede darle la información que necesita.— señaló hacia el pasillo

—Gracias.— dió media vuelta acercándose al médico —Doctor, ¿Cómo está mi amigo?.—

—¿José Canela?.— reviso algunos papeles que traía en mano

—Si, es él, ¿Cómo se encuentra?.— fue el turno de Ashley

—Verán el accidente fue realmente fuerte. Su amigo tuvo un choque con un automóvil, perdiendo el control, salió de la carretera y se volcó. El conductor del auto contrarió venía en estado de ebriedad, además sus estudios lanzaron que el alcohol no era lo único en su sistema, había algunos rastros de sustancias ilícitas. Puesto que después de una recuperación estará en la comandancia. — suspiro —En cuánto a su amigo, lamento informar que le inducimos un coma, su cerebro está muy inflamado debido al fuerte golpe que recibió, pudo haber tenido un derrame cerebral. No sabemos si despertará, y si lo hace puede tener problemas motrices.—

—¿Cómo que problemas?.—

—Perdida del habla o inclusive no podría volver a caminar. Pero primero que nada necesitamos ver cómo reacciona en este lapso de tiempo. Lo lamento tanto, me retiro.— avanzo hacia la recepcionista

—¿Por qué el Ash?.— susurro Bryan con voz rota y algunas lágrimas deslizándose por sus mejillas

—No lo sé hermanito, pero confío en que se salvará, es muy fuerte.— abrazo a su hermano acurrucándose con el

(...)

3 semanas después

Hola Jos.— tomo asiento junto a la camilla, dónde su amigo llevaba días sin poder despertar —Vamos hermano, abre los ojos, despierta, no sabes cuánta falta nos haces.— sonrió melancólico —Tú mamá viene todos los días, te cuida y te plática como le ha ido, pero te llora demasiado, por favor, despierta.—

Tomo la mano de su amigo, estaba muy fría y un poco pálida. Lo extrañaba tanto, nadie a excepción de ellos sabía acerca del accidente de Jos. Lo visitaban diario y hablaban con el, estimulando su sentido del oído.

De pronto la máquina del pulso comenzó a sonar debido a que sus latidos eran muy rápidos, su mano fue levemente apretada, y cuando miro hacia el rostro de su amigo, el abrió los ojos de golpe.

—¿Mamá?.—

—¿Jos?.— se alejó para observarlo mejor

—Disculpa ¿Te conozco?.— su rostro reflejaba confusión —¿Sabes dónde estoy? ¿Mi mamá está aquí?.—

—Y-yo iré avisar que has despertado.— tomo la perilla de la puerta desconcertado y con unas inmensas ganas de llorar

—Perdona que te moleste, pero, ¿Podrías llamar a mi mamá?. No sé dónde está y sería maravilloso tenerla aquí, por favor.—

—Yo le diré.— sin más salió

(...)

Todos estaba dentro de la habitación del pelinegro atentos a cada movimiento del médico.

—¿Qué sientes?.— preguntó el médico

—Me duele un poco la cabeza, siento las piernas pesadas y la garganta muy seca.—

—¿La parte del cráneo, te duele?.— se colocó su estetoscopio y comenzó a pasarlo por la espalda del pelinegro, pidiendo que hiciera algunas respiraciones

—Solo la parte de atrás.— miro a su al rededor —Dictor, ¿Quiénes son ellos?.— susurro

—¿No los reconoces?.—

—N-no, solo se que mi mamá y mi hermana están aquí, no se quienes son los demás.— hablo apenado

—De acuerdo.— se giró hacía los demás —El joven Canela, a logrado despertar sin alguna alteración de salud. La pesadez y el dolor cesarán con el tiempo, dado que pasó mucho tiempo inconsciente. Por otro lado, lamento decirles esto, pero, el joven a perdido la memoria.—

Todos jadearon en asombro y Bryan, se permitió llorar aún más.

—Él parece reconocer a su familia, pero no a sus amigos. Puede que haya perdido más de la mitad de sus recuerdos. No los reconoce y realmente no lo sé con exactitud. Temo decirles que no hay manera alguna de poder hacer que sus recuerdos regresen. Necesita tiempo, él poco a poco recordara y estimulará su cerebro solo.—

—Él va a recuperar sus recuerdos, ¿Verdad?.— pregunto Mariana, la mamá de Jos

—Espero que sí, hay casos que no logran hacerlo, y tienen que me empezar desde cero sus vidas. Debo recomendarles que no lo fuercen, el lo hará por cuenta propia, poco a poco y con calma. Si lo fuerzan o se lleva grandes emociones podrá tener un colapso, y eso sería fatídico. Por favor sigan las recomendaciones.— entrego unos papeles a la enfermera —Me retiro.—

Y el destino tenía otra manera de lograr que Jos olvidará Alonso. Le quitó parte de su vida y sus recuerdos, Dejándolo confuso y con muchas dudas sobre quienes eran aquellas personas que estaban con él y su familia.

El destino fue egoísta, pues no solo dejo a un chico sin recuerdos, sino que también le quitó a sus amigos y familiares, a una persona importante para ellos, y que no saben, si volverán a encontrar.

Regrésame al pasado ♡ JVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora