CAP 10

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Después de ver tantas películas de miedo, me escondí en mi cuarto, leyendo un libró, faltaban 3 días para que regresará a mi casa, pude liberarme de un peso al dejar esa noche, nunca esperé estar tan tranquila, Melissa entró al cuarto

¿Terminaron de verla película?

Si, estuvo fatal, pensé que era buena pero como siempre me estafaron

Te dije que no la comprarás

Debí hacerte casó...¿que lees?

Fangirl

¿Es bueno?

Claro que sí, está historia me representa en algunas cosas y el muchacho Levi, aaahh, ojalá fuera real, otra más a mis novio ficticio número 13

Así no tendrás novio

¡Eso que importa! Tengo suficiente con mis novios ficticios, ellos no esperan nada y aceptan a las chicas como yo

Si, claro, como tú, una chica con el autoestima bajó por no tener buen cuerpo

Hey, mi corazoncito, sabes que es verdad

Claro que no

Comenzamos una guerra de almohada entre las dos, era agradable jugar con ella, me sentía niña de nuevo, seguimos así hasta dormirnos, dormía bien hasta escuchar algo raro, era estraño, me levanté para despertar a Melissa, la moví pero no me respondía, ella con nada la despertaba, caminé sola agarrándo un palo, seguí el ruido, era en la cocina, había rasguños en las ventanas con demasiado miedo, abrí la puerta trasera, muy despacio ampli la puerta, some mi cabeza, veía el bosque oscuro, di algunos pasos para confirmar, no había nada, creía que era algún animal comiendo de la basura cuando estaba a 2 pasos de entrar, sentí una mano en mi boca, me tomo con fuerza, empecé a preocuparme miré la cara del hombre que me tomaba de las muñecas, era repugnante, su sonrisa era de diversión, su cabello era delgado y largó, sus ojos eran rojos, me asusté más

¿Que tenemos aquí?

Con su uña larga acaricia mi mejilla, apestaban a sangré

Si, es linda pero tiene un aroma fascinante, atrapaste algo bueno

Era otro hombre, tenía una gabardina elegante con ropa de marca, esté era más humano que el otro pero tenía los mismos ojos y las mismas uñas largas, sentí su uña presionando mi garganta, salía sangré, el que me estaba sujetando sacó su asquerosa y lengua larga, limpio mi sangré, en ese momento mi cuerpo se estremeció

Bueno...tenemos que irnos para el banquete

Apesar de mover mi cuerpo con fuerza no podía soltarme de ellos, sentía el frío helado en todo mi cuerpo, al parecer nos movíamos muy rápidos, no podía creerlo, había sobras por todos los lugares, me miraban con deseó, algunas risas sobresalían, estaba en un gran problema nunca imaginé que ésto pasará, al detenernos estaba atada en un árbol, no podía gritar, me cubrieron la boca con trapo, volteé a mi alrededor, no era la única en este lugar había hombres y mujeres en la misma situación, sus caras asustadas y el forcejeo indicaban nuestra muerte

Bienvenidos, está noche tendremos un gran banquete gracias a nuestros nobles compañeros en su cacería, hay piezas de buena calidad para todos, no quiero peleas entre camaradas y a los demás nos voltea a nosotros les deseó una buena cena

Ese fue el comienzo de una cacería algunos de ellos corrían a su presa, podía ver las lágrimas de las personas, sus caras eran de sufrimiento mientras los mordían sus bocas se extendían con colmillos afilados atrevezando la carne como papel, muchos gritos ahogados escuchaba, yo solía pedía salir de esta pesadilla al momento de acercarse algunos de ellos gritaron, las criaturas peleaban con esas bestias, eran lobos gigantes, mordían con bestialidad sus cuerpos, algunos alcanzaban rasguñar a los lobos otros ni los tocaron, ésto era una masacre de sangre, rugido y colmillos, me congelé al sentir la sangre en mí, no quedaba nadie de ellos, yo solo seguía me quedé en shock no sabía que hacer, un lobo se acercó a mí, me olfateo, no respondía, dejé de sentir mi corazón al ver qué uno de ellos Jalaba mi cuerda, caí en el suelo, me levanté poco a poco al sentir si gruñido del lobo, no lo miré, por miedo, otro lobo de color negro se me acerca, era el mismo de aquella barranca, olfateo mi marca, gruñó y miró al otro lobo, algo me tomó de la blusa, era alguien, sentía sus manos en mi piel, no dijo nada solo me puso una chaqueta en mi cara, me agachó la cabeza mientras habló

Camina.

Aullido de LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora